Motivar, creer en las personas y en todos los recursos que tienen para conseguir cualquier objetivo que se propongan, tanto a nivel personal como profesional, escuchar y crear un espacio sin juicios donde cada persona es única y válida, e invitar al cambio y a hacer realidad sueños, ayudando y acompañando en el proceso define la actividad que desarrolla la coach Sonia Gutiérrez.

Comenzó esta labor hace apenas un año y pretende llegar a la mayor cantidad de personas para compartir los grandes resultados que su profesión puede proporcionarles. “Es algo en lo que confío ciegamente y deseo me permita vivir de ello en dedicación exclusiva”, señala.

Para animarse a iniciar esta nueva faceta profesional en tiempos de crisis rompió dos leyes, según ella misma afirma: “La ley del límite personal (si hago lo que siempre he hecho nunca llegaré más allá de donde siempre he llegado); y la ley del límite social (si hago lo que todos hacen nunca llegaré más allá de donde todos llegan). Se resume en una palabra: atrevimiento”. La idea surgió a raíz de su inquietud por formarse y desde la perspectiva de su vocación de apoyo al crecimiento del ser humano. “Descubrí el coaching hace año y medio, cuando decidí ampliar mi formación, y desde entonces se ha convertido en una forma de vida para mí. Quiero compartirlo y ayudar a las personas a que consigan una vida plena”, asevera Gutiérrez.

Para lograrlo se formó como coach hace año y medio, y ha profundizado mediante cursos y másters en técnicas y herramientas que mejoran y amplían el ámbito de actuación de esta profesión, tales como E.F.T., Coaching Sistémico, P.N.L., etc. Además es trabajadora social desde 1991, con experiencia en mediación y ayuda para resolver problemas sociales y conflictos personales.

En 2004 dio un giro radical a su vida profesional y comenzó a prestar servicios de asesoría a autónomos y empresas. Esta nueva experiencia, sumada a su profesión, la impulsan a ampliar sus conocimientos y formarse como coach personal y empresarial. Recientemente se ha titulado como ‘formadora de formadores’, una especialización que faculta para motivar a las personas que desarrollan labores de formación.

No ha recibido ningún tipo de ayuda en su nueva labor y pertenece a la Asociación de Coaching Ejecutivo, Organizativo y Mentoring de Madrid. Y su objetivo es desarrollar su nueva labor en la Comunitat y por todo el país. “No me marco fronteras”, afirma.

Para darse a conocer confía en las nuevas tecnologías, página web, medios impresos, coaching empresarial a través de asesorías y en el boca a boca. Y sus objetivos de cara al futuro pasan por “ayudar con mi trabajo a que cada vez más personas consigan su meta o sueño. Igualmente ayudar a los equipos humanos de las empresas a que optimicen sus recursos y trabajen en un entorno unido, relajado y productivo. Apoyar a las personas para que tengan una vida plena”, concluye. H