Moncofa presenta en Fitur la nueva línea de folletos y guías turísticas que, bajo el eslogan ‘Moncofa, mar de actividades’, pretende mostrar el gran abanico de recursos turísticos con los que cuenta el municipio. Se trata de tres publicaciones: el nuevo plano turístico de la localidad, el folleto de rutas turísticas y la nueva guía general turística, que han sido editadas en diferentes idiomas e incluyen las novedades que incorpora la oferta del municipio, como las nuevas zonas biosaludables, la playa naturista de Beniesma, la playa canina y las nuevas zonas verdes, entre las que se incluye la renaturalización del río Belcaire, o la ampliación del sendero azul Europeo hasta la localidad vecina de Xilxes.

El municipio también ha mejorado su presencia en las redes sociales (Instagram, Facebook...), en las que ofrece información detallada de sus atractivos. A este respecto, el alcalde, Wenceslao Alós, señaló que “es importante evolucionar y crear más infraestructuras turísticas, pero también lo es dar a conocer la nuevas zonas para que el público tenga la oportunidad de conocerlas y disfrutar de ellas”. En esta línea, la concejala de Turismo, Lola Alós, destacó que “Fitur constituye el espacio idóneo para presentar estas guías, que difunden el valor de nuestras playas, rutas y patrimonio, y dan un paso más en la promoción y dinamización”.

En los últimos años, Moncofa ha señalizado de forma interpretativa la mayoría de sus recursos turísticos, e instalado paneles con las rutas de la localidad (Ruta de la naranja o Senda dels pescadors). Estas acciones rubrican “el esfuerzo por ofrecer alternativas para desestacionalizar el turismo, con protagonismo de la naturaleza y la ecología; así como la voluntad de que la actividad turística cumpla un papel importante para potenciar la cultura”, apunta el técnico de Turismo, Francisco Peixó.

Moncofa también mostrará el desembarco de Santa María Magdalena, declarado de interés provincial; las propuestas que se desarrollan desde Semana Santa hasta septiembre; y la pasarela que libra la desembocadura del río Belcaire, que unirá los 4 kilómetros del Sendero Azul.