Si en ediciones anteriores de Fitur la Vall d’Uixó quiso aprovechar el potencial que suponen para la ciudad las cerca de 200.000 visitas que reciben cada año les Coves de Sant Josep, y para ello diseñaron y promocionaron el relato turístico del Camí de l’Agua, este año han ampliado la propuesta a través del Museu en Marxa.

La filosofía del proyecto es sencilla: dar a conocer los valores patrimoniales del municipio a partir de su principal recurso: el agua, que ha marcado el devenir de las diferentes civilizaciones que han habitado este territorio y han definido su perfil como entorno natural distinto.

Coincidiendo con la presentación de este proyecto, la alcaldesa, Tania Baños, explicó ayer que «en los últimos cuatro años nos hemos centrado en la modernización de les Coves, con una gran inversión para adaptarlas al siglo XXI», y el reto en la actual legislatura es «lograr que sus visitantes conozcan nuestro rico patrimonio, nuestra historia, nuestra cultura y nuestras tradiciones».

En la misma línea destacó que «somos herederos del agua, que es el origen del turismo en la Vall con el río subterráneo, pero también es la razón por la que nuestros antepasados se instalaron aquí». Y esa es la idea recurrente que vertebra el Museu en Marxa, que incluye la organización de visitas guiadas y la aplicación de la tecnología para dar a conocer el patrimonio local que, por distintas razones, no es visitable.