Hará bien la FIA y la F-1 en prohibir ese mapa motor llamado 'party mode' de los Mercedes, a partir de la próxima carrera aunque el equipo anglo-alemán haya accedido a firmar el nuevo Pacto de la Concordia que determina el reparto de ingresos de la TV entre los equipos. Si no lo hacen, cada clasificación se convertirá en un, mano a mano exclusivo, entre los dos pilotos de la 'flechas de plata'. Han logrado la 'pole' en tres de cada cuatro carreras desde el 2014, pero, en este 2020, no hay otro color que el plateado y negro. Valtteri Bottas logró la mejor posición en la última carrera de Silverstone, pero Lewis Hamilton no le ha dado ninguna opción en Barcelona.

HAMILTON, IMPARABLE

El hexacampeón alcanza las 92 'poles' y quinta en Barcelona. El primer intento fue bastante decente y eso me aseguró la 'pole', resolvió el inglés, sabiendo que para ganar casi es imprescindible pasar en primer lugar la primera curva. Hay muchos metros desde la 'pole' hasta esa primera frenada, así que será difícil mantener la primera posición comentó, anticipando el ataque de su compañero Bottas no duden de que lo intentaré, incluso de Max Verstappen (Red Bull), que arranca tercero, a siete décimas en clasificación, pero con un ritmo de carrera mucho más próximo a los Mercedes. Es lo máximo que podíamos hacer, aunque, en carrera, será distinto. Espero poder presionarles aunque ya se sabe que es muy difícil adelantar aquí, explicó el holandés, que debutó con Red Bull en este trazado, logrando la primera victoria de su trayectoria en F-1.

Puede que la estrategia y el calor brinden oportunidades extras en esta edición del 2020. Es verano, nunca había estado aquí con tanto calor. Físicamente es más complicado. Es duro. Los problemas son básicamente físicos. necesitas mucha fuerza para frenar, las fuerzas laterales hacen que te duelan el cuello. En términos de pilotaje, tienes que cuidar las gomas, hay que saber dónde empujar, y mantener un equilibrio, desvela Hamilton. Y lo corrobora Carlos Sainz: Hace mucho calor, será una carrera dura por el calor y lo rápido que van estos coches en un circuito tan físico, explica el madrileño tras superar a su compañero Lando Norris y situarse séptimo, a solo dos centésimas del sexto. En el mejor de los casos solo podíamos mejorar un puesto, el del Red Bull de Albon, pero al final no me sentido tan cómodo con el coche como en la primera parte de la clasificación".

EL DESASTRE DE VETTEL

Sainz superó entre otros muchos a los dos Ferrari. Después de quejas y disculpas en los últimos grandes premios, Ferrari accedió a cambiar el chasis de Sebastian Vettel, pero, ni así. El tetracampeón sigue en caída libre. Cometió fallos que facilitaron los títulos de Lewis Hamilton en 2017 y 2018, y la llegada de Charles Leclerc a Maranello en 2019 acabó por desquiciarle. Este 2020 es un auténtico viacrucis para el alemán. Va de error en error, como un novato. Volvió a quedarse en la Q-2 por segunda carrera consecutiva, a tres décimas de su compañero, sin haber completado ninguna vuelta redonda en toda la clasificación. No es extraño que le llueva la misma pregunta en cada gran premio ¿Acabarás la temporada con Ferrari? El chico de Hoppenheim insiste en que no nada que le permita pensar en que no será así.