Adolfo Domínguez Fernández, presidente y principal accionista del grupo Adolfo Domínguez desde hace 28 años, ha decidido consolidar el relevo generacional en la compañía, renunciando a la presidencia y apoyando la elección de su hija mayor y consejera delegada, Adriana Domínguez (ambos en la foto), como nueva presidenta ejecutiva de la compañía. El grupo cuenta con 391 puntos de venta en 22 países y facturó 112 millones de euros en último ejercicio auditado.

La decisión refrenda la sucesión natural en la firma de moda de autor, que ahora debe encarar el futuro de la compañía en el marco de la peor recesión económica mundial provocada por la crisis del coronavirus y el cierre de tiendas. Adriana Domínguez es consejera de la empresa desde noviembre del 2016 y desde julio del 2017 el consejo delegó en ella todos los poderes ejecutivos, primero como directora general (2017-19) y como consejera delegada (desde julio de 2019), cargo que ahora se añade al de presidenta del consejo de administración.