Aunque comienza una nueva era en la moda, la de las presentaciones digitales, hay quien se resiste. La primera edición de la Milano Digital Fashion Week no solo se llevará a cabo con la novedad de ser un evento disponible a través de Internet. Será también la primera en la que Dolce&Gabbana volverá a la pasarela oficial en 22 años. Será el 15 de julio y con un desfile casi como los de siempre.

Stefano Gabbana y Domenico Dolce dieron un portazo en 1998 a la Camera Nazionale della Moda Italiana (CNMI) por desavenencias con quienes estaban entonces al frente y desde entonces, como almas libres, desfilaban fuera del calendario oficial. Pero eso ya es historia.

El periódico italiano Corriere della Sera se encargaba hace unos días de dar la noticia —la moda en Italia es casi una cuestión de Estado— con una entrevista a los diseñadores, en la además de analizar cómo la pandemia está afectando a un sector tan distintivo del país transalpino, insistían en que el espectáculo debe continuar. Y el suyo tendrá lugar en los jardines del campus universitario del Hospital Humanitas, a cuyo instituto de investigación han destinado importantes donaciones.

El desfile será al aire libre, con modelos masculinos de carne y hueso y un público restringido. Se retransmitirá en directo a través de la plataforma de la Semana Digital organizada por la CNMI. Y es que, durante esos días las marcas tendrán 20 minutos para la transmisión en streaming, siendo cada una libre de elegir el formato (espectáculos físicos o virtuales, pasarela o vídeo, historias o películas) y las colecciones (hombre o mujer) presentadas.

«Nosotros, no hay más que ver la ropa que hacemos, somos unos enamorados de Italia y de toda su bellezas y sus recursos. Hemos invertido nuestra energía en apoyarla y darla a conocer al mundo», explicaban los diseñadores. «Tras el coronavirus la moda, más que nunca, necesita una fuerte positividad y, en un momento particular como este, pensamos que era importante y justo unir fuerzas. Cada marca es diferente, pero al final estamos bajo una misma bandera: la de Italia y la del made in Italy».

En un comunicado, el presidente de la Cámara Nacional de la Moda, Carlo Capasa recalcaba la importancia del regreso de Dolce&Gabbana. «Hoy, más que nunca, es importante unirse para crear un sistema y salvar nuestra industria, única en el mundo. Su vuelta lanza un fuerte mensaje de unidad en un momento muy difícil».

SATURACIÓN DEL MERCADO /Respecto a su presentación, los diseñadores aseguran: «Habrá mascarillas, guantes y distancia de seguridad, pero será un desfile de verdad. Para nosotros son del todo imprescindibles: es imposible transmitir a la gente con otro formato las mismas sensaciones que se generan en un desfile. Generalmente relacionamos los hospitales con cosas negativas, pero presentar nuestro trabajo en uno puede tener un significado muy especial».

La firma también mostrará sus colecciones de alta joyería y alta costura para hombre y mujer a principios de julio a través de eventos online y a través de citas personalizadas con los clientes. Mientras los talleres estaban cerrados, como las tiendas, los creadores sicilianos no han parado.

Junto a Armani, D&G es una de las últimas compañías independientes que resisten en la industria del lujo: una de las últimas marcas que pertenecen a los diseñadores que las fundaron. Armani precisamente, tras su último desfile a puerta cerrada en Milán, aseguraba que la moda debería echar el freno por tanta saturación. «Seguramente el coronavirus será lo que terminará trayendo a la industria de la moda de vuelta a la realidad», decía en este sentido Stefano Gabbana, partidario de la vieja normalidad.