Una carrera de 0,5 km es, probablemente, el aliciente para que todo aquel al que no le guste correr se inicie en el hábito del ejercicio. Y, si es por una buena causa, mejor que mejor.

El pasado 5 de mayo se celebró en Boerne (Texas, EEUU) la primera carrera de 0,5 km con áreas para beber cerveza o comer donuts gratis. Y fue todo un éxito por una buena causa: se recaudaron cerca de 20.000 dólares (casi 17.000 euros) para la fundación Blessings in a Backpack, encargada de movilizar recursos para proporcionar alimentos los fines de semana para niños de escuelas primarias de todo Estados Unidos.

Una carrera de 0,5 km es, probablemente, el aliciente para que todo aquel al que no le guste correr se inicie en el hábito del ejercicio. Y, si es por una buena causa, mejor que mejor.

El pasado 5 de mayo se celebró en Boerne (Texas, EEUU) la primera carrera de 0,5 km con áreas para beber cerveza o comer donuts gratis. Y fue todo un éxito por una buena causa: se recaudaron cerca de 20.000 dólares (casi 17.000 euros) para la fundación Blessings in a Backpack, encargada de movilizar recursos para proporcionar alimentos los fines de semana para niños de escuelas primarias de todo Estados Unidos.

La organización dio incluso la posibilidad de desembolsar 25 dólares más (cerca de 21 euros) para completar la carrera en una caravana.

Los finalistas obtuvieron medallas de reconocimiento, pegatinas para alardear en la parte trasera del coche y camisetas del evento.