Raphael Samuel, tiene 27 años y es natural de Mumbai (India). Preguntado por su "estado" asegura que está "vivo y lamentándolo [sic]". ¿Por qué? "Porque no pedí nacer". Se define como "antinatalista", un movimiento que gana adeptos en su país, donde los jóvenes urbanitas cada vez se resisten más a la presión social de tener hijos. Desde su página de Facebook, Nihilanand, ha anunciado que piensa demandar a sus padres por haberle traído a este mundo "sin su consentimiento".

Si la denuncia prosperase, podría ser el germen de una demanda colectiva estratosférica que calapsaría los juzgados de todo el planeta. Pero veamos cuáles son los argumentos que esgrime este joven cabreado.

Samuel ha explicado en la revista The Print que los padres "son unos hipócritas", puesto que tienen a sus hijos "por su alegría y su placer". Y no es que él se lleve mal con los suyos -"amo a mis padres", asegura- ni que tenga una existencia difícil -"mi vida ha sido increíble", sostiene-, pero no cree que los padres tengan derecho a "hacer pasar otra vida por la escuela, la búsqueda de un trabajo..., sobre todo cuando esta persona no ha pedido existir".

DISFRAZ EN YOUTUBE

Escondido tras unas gafas de sol y una barba muy poblada, Samuel explica en Youtube las razones que le han llevado hasta el "antinatalismo". "Tiene una gran tradición en sectas que surgen del budismo y del cristianismo, y más de un filósofo ha argumentado que lo mejor que le puede pasar a la humanidad es su extinción", sostiene. Tener hijos es comparable al "secuestro o la esclavitud", defiende este joven antiprocreación.

Samuel, con más de 2.000 seguidores en su página de Facebook, no es el único que cree que la natalidad sin consentimiento del neonato será nuestra perdición. Algunos seguidores de esta filosofía esgrimen razones medioambientales, pues creen que la raza humana está agotando los recursos del planeta.

Al frente del movimiento antinatalista medioambiental en la India está Pratima Naik, un ingeniero de Bengalaru de 28 años, que se ha comprometido en no tener hijos. Además, "hay muchos niños que necesitan adopción", razona desde su página, llamada Childfree India. El logo de su perfil en las redes es meridianamente claro: una señal de tráfico tachando a un bebé.

"Todos somos conscientes de lo muchos que sufrimos en la vida", argumenta otro antinatalista indio convencido, Alok Kumar, de 34 años, desde su canal de Youtube. Explica que cuando se acercó la edad de casarse sus padres se indignaron con él al saber que quería estar con una mujer que aceptase no tener hijos. "Muchas de las mujeres que conocí en realidad estuvieron de acuerdo conmigo, en no tener niños. Pero ellas callaban porque tenían demasiado miedo a decir la verdad, o porque querían complacer a sus padres", explica.