La subdelegación del Gobierno de Córdoba ha impuesto una multa de 10.400 euros al príncipe Joaquín de Bélgica, sobrino del rey del Bélgica, por saltarse las normas de confinamiento que marcaba el estado de alarma al llegar a Córdoba el pasado 24 de mayo pasado y no permanecer 14 días aislado, tal y como se solicitaba a todos aquellos que procedían del extranjero.

El joven, de 28 años, acudió a dos reuniones con familiares y amigos el 25 y el 26 de mayo, en compañía de su pareja, Victoria Ortiz. A las pocas jornadas, se confirmó su positivo por coronavirus, lo que obligó a poner en cuarentena a todos los asistentes de las reuniones a las que asistió.

El miembro de la casa real belga, hijo de la princesa Astrid y del príncipe Lorenzo, reconoció «no haber respetado todas las medidas de cuarentena» durante su viaje a España y pidió «disculpas» por ello mediante un escrito en inglés y en castellano.