El programa 'Salvados' no tenía prevista aún su vuelta a la parrilla de La Sexta, pero la rabiosa actualidad catalana pedía a gritos un especial. Y el equipo se puso manos a la obra. Así, el domingo, 24 (21.30 horas), a una semana de la celebración, o no, del anunciado referéndum sobre la independencia de Catalunya, el espacio ofrece la entrevista que Jordi Évole le hizo unos días antes (el viernes, 22) a Carles Puigdemont, 'president' de la Generalitat de Catalunya, sobre el 1-0.

Le charla tuvo lugar en el Palau de la Generalitat. "En una sala anexa a su despacho, mientras escuchábamos los tambores de la fiesta de la Mercè, con lo que había mucho contraste entre lo que pasaba dentro y fuera", comenta Évole. El periodista reconoce que hubiera preferido el formato de cara a cara, pero fue imposible. "Siempre preferimos que haya más pluralidad y poder preguntar de todo a todos. Pero tanto el Gobierno español como el PP no quisieron participar , con lo que solo pudimos hacer la entrevista a Puigdemont. Queda bien claro y manifiesto en el programa", remarca.

Carles Puigdemont conversa con Jordi Évole en el especial por el 1-O de Salvados (La Sexta).

Del 'president', Évole destaca su empeño por seguir adelante con el referéndum. "Lo he visto muy determinado y con un cierto enroque. Mantiene que el 1-0 se celebrará con todas la garantías y no contempla otra alternativa", afirma. "Y me reconoció, aunque le costó, que no había otro resultado posible que el 'sí'. Porque lo convocan unas fuerzas independentistas, hay campaña por el 'Vota sí', pero no por el 'Vota no'... .Hay una serie de condiciones que invitan a pensar que nadie apostaría por otro resultado", insiste el director de 'Salvados'.

Carles Puigdemont y Jordi Évole, en el Palau de la Generalitat / LA SEXTA

En su entrevista, Puigdemont asegura, asimismo, que a las 48 horas de la proclamación de resultados, el 'sí' llevaría directo a la declaración de independencia: "Me ha sorprendido que no contemple más escenarios. Solo ese. Yo, viendo la actitud el Gobierno estos días, no descartaría que no se pudiera celebrar. No sé, en la puerta puede haber 20 policías que no te dejen pasar. Yo lo contemplaría. Pero él tiene una determinación absoluta", añade.

Sin tensión

Según Évole el 'president' respondió a todas las preguntas que le formuló en la entrevista. "A todas, aunque algunas con la habilidad que tienen los políticos de contestar sin contestar. Pero ya estamos acostumbrados. Lo hacen todos; no solo Puigdemont", reconoce.

El tono de la conversación no fue tampoco tenso: "Bastante tensión tenemos ya. Mi tono no fue agresivo, aunque no acostumbra a serlo", remarca. Y añade: "La entrevista no le va a gustar a nadie. A los menos posicionados les dará información sobre lo que piensa el entrevistado. Pero a los más posicionados no les gustará. Dirán que por qué no has preguntado esto. Que por qué no has tenido un tono más agresivo con un golpista...

Bregado en este tipo de batallas, Évole se lo tomará con filosofía. "Tras la emisión, apagaré el Twitter y me iré a dormir. O saldré a dar una vuelta, que el lunes es festivo en Barcelona. Es que llega un momento en que los periodistas tenemos que dejar de mirar un poco a la grada, porque si no no podríamos hacer nada", concluye.