Jorge Lorenzo, de 32 años, pentacampeón del mundo de motociclismo, vuelve a estar de moda. Bueno, nunca ha dejado de estarlo. El pasado año, por su enorme dificultad para hacerse con el control de la poderosa Honda RC213V del equipo campeón Repsol Honda, como compañero del casi invencible Marc Márquez, poseedor de ocho títulos mundiales.

A final de temporada, principios de noviembre, al anunciar su retirada del mundo de las carreras. Poco después, porque comentó que se iba de vacaciones a Bali con unos amigos con billete de ida, pero aún no de vuelta. Y, nada más regresar de la playa, porque anunció que este año volvería al paddock de MotoGP aunque con menos presión que antes.

Fue en ese instante cuando empezó a comentarse que, probablemente, el pentacampeón mallorquín estaba meditando la posibilidad de convertirse en el piloto probador de Yamaha para ayudar a Valentino Rossi, Maverick Viñales, Fabio Quartararo y Franco Morbidelli a intentar destronar a Márquez esta temporada. O, incluso, quien sabe, si su amigo el ingeniero italiano Gigi DallIgna, cerebro de la firma Ducati, le puede convencer que escoja a la marca de Borgo Panigale para hacer lo que antes hacia el impetuoso y velocísimo australiano Casey Stoner, ayudar a mejorar la ya fabulosa Desmosedici.

Solo habrá 100 unidades

Lo cierto es que Lorenzo sigue en el candelero y más después del divertido juego que ha protagonizado, durante el último mes, en su Instagram donde tiene casi dos millones de seguidores. A finales del 2019, publicó un mensaje en el que, tras un vistoso telón, escribía: Queridos Reyes Magoseste año me he portado mejor que nunca. Y dejaba la pregunta en el aire de "¿qué habrá detrás del telón?" Y, llegado el día 6 de enero, sí, el día de los magos, lo enseñó, lo destapó, lo descubrió.

Lorenzo se acaba de regalar, para empezar el año de su retiro (o no), un impresionante descapotable de más de 2 millones de euros. Hay quien habla, incluso, de 2.5 millones de euros. Se trata de uno de los 100 Pagani Huayra Roadster que está fabricando, con la meticulosidad de un orfebre, el italiano Horacio Pagani, en su factoría de San Cesario sul Panzaro, en Italia. El mismo Pagani le hizo entrega del descapotable en una ceremonia que puede verse en el video que Lorenzo ha hecho público.

Dos largos años de espera

Tuve que esperar más de dos años, pero valió la pena, escribió el piloto mallorquín el día de Reyes. Orgulloso de ser uno de los 100 propietarios de esta obra de arte sobre ruedas. Gracias, Horacio y todo tu equipo, me hicisteis muy feliz.

El coche está construido con los materiales más sofisticados que existen, entre ellos la fibra de carbono, que lo encarece muchísimo, y está equipado con un impresionante motor Mercedes AMG 6.0 V12 biturbo, que ofrece más de 750 caballos de potencia y una velocidad punta de 388 kilómetros por hora.