El hijo de Isabel Pantoja deberá pagar 12.000 euros a un empresario de Alicante por darle plantón como pinchadiscos, al no acudir a la sesión contratada en la sala Danzáa Klub de San Juan de Alicante. El representante de la sala y el de Kiko Rivera habían firmado un contrato para la actuación de Rivera el pasado 28 de noviembre de 1 a 3 horas de la madrugada, a cambio de 2.000 euros más el IVA.

Después de que este no ofreciera una sesión contratada, se supo que el hijo de la tonadillera estuvo en las horas anteriores en un hotel de Alicante aunque a la hora del espectáculo no salió del mismo pese a la obligación contractual. "No dio la cara" y únicamente su representante dijo que había enfermado repentinamente, sin más detalles. "Hemos contratado a muchos artistas y nunca jamás nos ha dejado tirado nadie. Creemos que ha sido un caradura ya que no hemos visto un mínimo esfuerzo por darnos una explicación ni por compensar la ausencia en otra fecha posterior, y ni tan siquiera nos ha devuelto el dinero adelantado", ha explicado el representante. Kiko Rivera puede recurrir.