Natalia Verbeke (Buenos Aires, 1975) ha vuelto a la televisión después de abandonarla hace dos años por la puerta falsa con'Bienvenidos al Lolita', serie de Antena 3 que fue cancelada a los ocho capítulos por baja audiencia. Ahora prueba otra vez fortuna como la forense Rebeca Martín de 'El Caso: Crónica de sucesos' recreación televisiva del mítico semanario sensacionalista que TVE-1 emite los martes (22.15 horas),

-¿Tenía ganas de volver a la tele?

-Sí. Sobre todo con un papel tan atractivo como el de Rebeca en una serie tan bonita como esta.

-Usted interpreta a una forense que se toma su oficio con cierto humor negro, ¿no?

-Supongo que es como los médicos, que están ya tan acostumbrados a ver cosas terribles que hay un punto en que se convierte en su día a día y ya no les impacta. Se construyen una coraza para poder dedicarse a eso, porque si no sería muy difícil sobrevivir a ese tipo de profesiones tan duras. Mi personaje tiene bastante humor negro en casi todas las autopsias en las que participa.

-Esta serie parece llena de mujeres adelantadas a su época. ¿Lo ha notado?

-Sí. Cuando me propusieron la serie y leí el guion me gustó mucho la entidad tan grande que tiene cada una de esas mujeres. Se presenta en la serie una mujer valiente, luchadora y avanzada a su época frente al estereotipo de mujer de aquellos tiempos, que era generalmente ama de casa. Me encantó porque de repente es una apuesta por esa idea. Es un poco un regalo y un homenaje a las mujeres.

-¿Se considera una mujer valiente y arriesgada?

-Sí. Creo que hoy en día casi todas las mujeres son echadas hacia adelante. Todas trabajamos, somos independientes y somos luchadoras porque nos movemos todavía en un mundo de hombres.

-¿Qué sabía de 'El Caso' antes de esta serie?

-Lo que me había contado mi hermana. Ella había estado analizando ese semanario en sus clases de periodismo. Me contó que era prensa amarilla de sucesos. Como a mi siempre me ha gustado leer los sucesos en los periódicos, me llamaba mucho la atención.

-¿Es usted morbosilla?

-Un poco sí. El que lee ese tipo de noticias es un poco morboso. Lo que pasa es que cuando lees esa clase de informaciones te deja una sensación de intranquilidad. Pero es inevitable.

-¿Y qué ha aprendido de la filosofía de 'El Caso'?

-Que se atrevía de alguna manera a contar aquellas cosas que los otros periódicos no podían contar por la censura del Régimen.

-¿Le sigue chivando cosas su hermana ahora que hace la serie?

-No, más bien me pregunta ella a mi cuál es el caso que estamos haciendo.

-Lo último que hizo en televisión fue 'Bienvenidos al Lolita'. ¿Por qué no cuajó?

-La serie fue líder de audiencia hasta el cuarto capítulo, pero luego 'El Príncipe' se la comió de alguna manera. Me dio pena porque nos divertíamos muchísimo.

-¿Queda ya muy atrás 'Doctor Mateo'?

-Hace ya tiempo que terminó (cinco años). Fue una serie maravillosa con un personaje precioso al que le tengo muchísimo cariño y con unos compañeros estupendos. Los guionistas Olga y Mauri están también en esta serie. Tengo recuerdos fantásticos.

-Ahora que se desenvuelve en el siglo XX, ¿qué echa más en falta del siglo XXI?

-Tendría que decir lo de los móviles, pero eso nos ha estropeado bastante a pesar de que yo sea una enganchada. Quizás echaría en falta la libertad y lo que han conseguido las mujeres.

-¿Tiene esperanzas de que el futuro Gobierno les trate mejor que el anterior?

-Espero que los que vengan apoyen más la cultura porque esto ha sido horroroso. La subida del IVA ha perjudicado muchísimo a los actores, a los empresarios y a la gente que va al teatro o al cine. Espero que se den cuenta de que la cultura es muy importante.

-¿Tendrá que venir un gobierno de izquierdas para que se cumplan sus deseos?

-No tengo ni idea. Yo no creo ya en ningún tipo de gobierno. Creo que al final todos hacen lo mismo. No entiendo nada de política y no voy a opinar porque sería muy atrevido por mi parte. Nunca he confiado en un político que llega al poder. Creo que el poder corrompe.