Neil Young ha dicho basta e interpondrá una demanda con el fin de impedir que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, utilice sus canciones en mitines de la campaña presidencial, según ha publicado la web oficial del músico canadiense

El reconocido artista, de 74 años, afirma que se incurrió en una violación de derechos de autor por el uso de las canciones 'Rockin' In The Free World' y 'Devil's Sidewalk', incluidas durante un mitin reciente de Trump en Tulsa, Oklahoma.

El "demandante no puede permitir que su música se use como 'tema musical' para una campaña divisiva, no estadounidense, de ignorancia y odio", se lee en el comunicado.

La demanda, que pide multas de hasta 150.000 dólares por cada infracción, no tiene fecha, pero el texto indica que los abogados de Young plantean presentarla ante un tribunal federal en Nueva York.

Neil Young ha expresado en repetidas ocasiones desdén por el uso del presidente Trump de sus éxitos musicales durante la campaña preelectoral de las presidenciales de noviembre, pidiéndole que se detenga su uso.

Nacido en Canadá y ciudadano estadounidense, Young calificó a Trump de "desgracia para mi país" a principios de este año, mientras apoyaba a Bernie Sanders en la carrera demócrata.

OTROS ARTISTAS

Young no es el único músico que ha censurado el uso de sus canciones en los mítines y campañas electorales de Trump, varios artistas de renombre internacional, incluidos Pharrell Williams, Rihanna , Aerosmith y Adele se han quejado de que Trump use sus canciones sin permiso. En junio, los legendarios Rolling Stones amenazaron con emprender acciones legales contra el republicano por el uso del clásico 'You Can't Always Get What You Want' en actos de campaña y hace unas semanas la familia del fallecido Tom Petty criticó duramente al presidente estadounidense por usar la canción del músico 'Won't Back Down también en el mitin que celebró en Tulsa, enviando a los organizadores de la campaña electoral una advertencia judicial de cese y desistimiento.