Carlota Barrera, una joven nacida en Gijón hace 26 años que iba para arquitecta, es la flamante ganadora de la octava edición del premio Who’s On Next, una iniciativa internacional impulsada por la revista Vogue y que es el galardón mejor dotado de la moda en España: 100.000 euros contantes y sonantes que pone Inditex para desarrollar un plan de negocio. El sevillano Ernesto Naranjo y la pareja madrileña Oteyza quedaron finalistas. El veredicto se dio a conocer en una gala celebrada en Madrid el pasado jueves, donde estuvieron muchas primeras agujas del panorama de la moda nacional.

Además del cheque, Jean Paul Gaultier le entregó a Barrera «unas perlas de sabiduría»: «Me hizo mucha ilusión que, como presidente del jurado, le gustara mi trabajo. Me aconsejó que intentara encontrar un balance entre las prendas que sueño y quiero hacer y lo que pueda comprar y ponerse la gente».

El premio, además de abrirle las páginas de Vogue, servirá para que Barrera pueda presentar una colección en desfile -ella hace ropa masculina- y dar a conocer la marca que lleva su nombre. «La moda es un trabajo 24/ 7, yo ya no sé lo que es un domingo. Y esta inyección económica puede significar un cambio enorme, un buen empujón para darse a conocer que habrá que aprovechar». El año pasado fue Palomo Spain quien ganó. «Sí. Ya le dije a Alejandro que con que me vaya la mitad de bien que a él ya me conformo».

Consciente de las muchas miradas que esperan ver su propuesta estética y comercial, Carlota Barrera ya está pensando en cómo será su pase en la pasarela de la Fashion Week de Madrid. «Tengo muchas ganas de mostrar lo que estamos preparando. Será la tercera vez. La primera estuvimos en el off y en la segunda nos hicieron un hueco en el programa oficial», recuerda.

Hace nada que acaba de lanzar su tienda on line. Ahí puede verse su colección The matador and the fisherman. Sus camisas de seda en colores lisos, en rojo, verde, blanco, sus pantalones rectos, sus monos con aberturas.... «También vamos a estar en una tienda multimarca pequeñita en Londres, que es donde tengo mi estudio y se piensa todo».

TOQUE FEMENINO / Un vistazo a la página web es darse de bruces con modelos androginos, los gemelos Nico y Jaco Solís que han posado también para Palomo. También con unas líneas muy depuradas y unos precios en libras: unas 500 libras (567 euros) por una camisa de seda. «Sí hay un toque femenino y la propuesta estética parece no gender pero al final el patrón manda. Que se lo pueda poner una mujer, perfecto, me encantará verlo, pero está diseñada para un cuerpo masculino».

Como maestro y referente, pone en un altar al belga Dries van Notten. «Me parece una persona increíble, muy trabajadora. Hace unas cosas preciosas y sin pretensiones. También destacaría al primer Margiela. El grupo de Amberes cambió la moda y creo que es el camino a seguir. Luego busco inspiración también en el arte, la música y la danza», expresa Barrera.

También hay guiños a España en sus colecciones. «Tenemos grandes artesanos aquí y por desgracia se está perdiendo su trabajo. Me gusta emplear técnicas antiguas como el ganchillo y darle un toque más contemporáneo para no perder de vista que queremos ser una marca con proyección internacional». Carlota insiste también en la necesidad de recurrir a tejidos nobles. «Es mejor producir menos y mejor que hacer un montón de prendas recicladas».

Puesta a imaginar, ve a muchos famosos con su ropa. También a alguna mujer como a Laura Ponte. «Me encantaría vestir a Javier Bardem, al que admiro muchísimo y me parece muy masculino. También a Harry Styles, que para mí es como el Mick Jagger de mi generación. El que estaba guapísimo con mi ropa fue Paco León. Le estoy muy agradecida».