La báscula de Russell Crowe debe de ser una de las más estresadas de Hollywood, con registros extremos, sin término medio. El actor australiano, fiel a su costumbre de engordar y adelgazar para meterse mejor en la piel de cualquier personaje (lo hizo para 'Gladiator', su papel más célebre), ha perdido ahora 23 kilos para 'Dos buenos tipos', una película de suspense con toques de humor en la que da réplica a Ryan Gosling y que se estrenará en mayo. En agosto estaba en 121 kilos y ahora, en 98.

Una vez conseguido el reto de ponerse en forma para su rol, Russell Crowe ahora quiere rebajar aún más el peso porque quiere conseguir una silueta mejor. La bicicleta ha sido su gran aliada para adelgazar.