El canal de televisión canadiense CBC ha confirmado que cortó la breve aparición de Donald Trump en la película 'Solo en casa 2', y argumenta que lo hizo antes de que fuera elegido presidente de Estados Unidos. El canal público en inglés emitió hace unos días el famoso filme navideño, de 1992, pero sin el cameo del polémico líder de la Casa Blanca.

Espectadores y medios de comunicación canadienses se preguntaron por qué CBC suprimió la escena, en la que Trump y Macaulay Culkin aparecen juntos. "Como suele ser habitual en las películas de cine adaptadas para televisión, 'Solo en casa 2' fue editada por razones de tiempo, para hacerla más corta", con la intención de agregar anuncios, explicó el jueves el portavoz del canal, Chuck Thompson.

"La escena con Donald Trump es una de las que se cortaron porque no era esencial para la trama. Estos cambios se hicieron en el 2014, cuando compramos los derechos de la película, antes de que Trump fuese elegido presidente lo fue a finales del 2016, insistió el portavoz.

"La película nunca volverá a ser la misma!", replicó en un tuit el presidente de Estados Unidos tras sugerir que su 'desaparición' era una medida de represalia solicitada por el primer ministro canadiense, Justin Trudeau. "Me imagino que Justin T realmente no aprecia que le haya hecho pagar más por la OTAN o el comercio!", añade Trump.

El multimillonario republicano tiene una relación complicada con Trudeau, a quien llamó "deshonesto y débil" después de la cumbre del G7 en el 2018, y más recientemente "hipócrita" tras la publicación de un vídeo en que el primer ministro canadiense parecía burlarse de él en una cumbre de la OTAN.

También su hijo, Donald Trump Jr., ha considerado "lamentable" lo ocurrido, y en las redes sociales se acumulan las críticas contra el canal público canadiense, sospechoso de actuar por motivos políticos.

Donald Trump aparece muy brevemente en 'Solo en casa 2'. De nuevo olvidado por su familia, el pequeño Kevin Macaulay Culkin lucha por encontrar su camino en medio del lujoso hotel en el que pasa las vacaciones solo. En un momento dado, para a un hombre vestido con un largo abrigo negro y una corbata roja para preguntarle dónde está la recepción. "Al final del pasillo a la izquierda", responde Trump, el dueño del establecimiento. El entonces magnate inmobiliario acababa de adquirir el Hotel Plaza de Nueva York, donde se filmaron varias escenas de la película, a principios de los años 90.