Ha sido la ruptura más comentada del verano entre el famoseo patrio, al menos por parte de ella, Alba Carrillo, porque el tenista Feliciano López ha echado pelotas fuera todo este tiempo y ha seguido con su calendario de torneos.

Ahora, tras la separación amorosa, tramitando el divorcio y con intención de pasar ya página, la modelo ha decidido deshacerse de sus vestidos de novia, que no son uno ni dos, sino tres. Y los tres con la firma de Rosa Clará.

Lo dijo el pasado lunes en la emisión de último programa de Hable con ellas, en el que ha estado colaborando este verano. «El programa y yo los vamos a donar a una asociación de mujeres maltratadas que se llama Mujeres unidas contra el maltrato», explicó.

Uno de ellos será para una de las integrantes del espacio televisivo, que ha rehecho su vida y se va a casar, mientras que por los otros dos se podrá pujar. «Se van a subastar para recaudar dinero y con lo que se consiga, arreglar la valla de una ecoaldea en la que viven las mujeres con sus hijos», comentó Alba Carrillo, que tiene un hijo, llamado Lucas, fruto de su relación con el expiloto Fonsi Nieto.

La decisión de Alba fue aplaudida por sus compañeras en el programa televisivo y también por una invitada del día, Terelu Campos, que destacó la importancia de esta causa. «No es un dardo envenenado ni nada por el estilo -puntualizó Alba-. Yo he sido muy feliz dentro de estos vestidos y espero que las personas que los lleven sean igual de felices».

NI UN AÑO DE MATRIMONIO / Alba Carrillo y el tenista Feliciano López se dieron el sí quiero en el Alcázar de Toledo en julio del año pasado. Ese día, la novia lució tres vestidos en tres momentos del enlace.

Para la ceremonia eligió un traje clásico, en brocado de seda natural y con escote cuadrado. Para la cena llevó un vestido de homenaje a la profesión de Feliciano López, una prenda inspirada en las tenistas de los años 40 y 50. Y en el baile posterior deslumbró con un modelo de corte sirena con pedrería en tonos marfil e hilo de plata y un pronunciado escote en la espalda.

La madrileña, de 30 años, anunció su inesperada separación el pasado mes de junio desen la portada de la revista ¡Hola!, once meses después de la celebración de la boda. «Feliciano me ha pedido el divorcio de manera fría y distante», dijo en aquel momento. Unas declaraciones a las que no respondió el tenista.

En el mismo programa de televisión Hable con ellas, la modelo y ahora presentadora Alba Carrillo ya explicó hace unas semanas, entre lágrimas, que el principio del fin de la relación amorosa se debió a la publicación de unas imágenes de Feliciano López con una chica morena en Miami. «Puse la mano en el fuego» creyendo en su fidelidad. «Me duele mucho porque no me esperaba esto de él. Le llamé y no me gustó su reacción», relató entonces.

LA FAMILIA, CULPABLE / Respecto a otras causas posibles de la sonada ruptura, Alba Carrillo también disparó contra la familia del tenista. «Son intrusos en la vida de su hijo y en nuestra relación. Entraban en mi casa, abrían los armarios, decidían qué muebles se ponían o quitaban. Lo que ellos llaman ayuda yo lo llamo exceso de control», explicó.

El peor parado fue el hermano de Feliciano López. «A sus padres les he querido muchísimo, pero a su hermano no lo trago». Según ha trascendido, la misma Alba Carrillo habría pedido al tenista su casa y una importante indemnización para darle el divorcio.