Hace cinco años José Castellanos decidió llenar la mochila con algo de ropa y cuatro enseres personales. Con ese corto equipaje y 200 dólares en el bolsillo se marchó en busca de un futuro que veía complicado en su Venezuela natal. Hace dos años recaló en València. Y de ahí a Morella para compaginar su trabajo en un restaurante de la localidad de Els Ports con su gran afición: el humor.

La borrasca Filomena ha dejado litorales dañados, media provincia de Castellón cubierta por la nieve, una posterior ola de frío... pero también el descubrimiento, ¿quién sabe?, de una nueva figura del humor. Humor tropical, humor a la venezolana, pero cambiando el sol caribeño por el frío, la nieve y el hielo morellano. Tras las nevadas, José ha dejado a más de uno perplejo en las redes sociales con su alter ego, Yufitoflow, con el que ironiza sobre la moda de sacarse fotos en bikini en sitios emblemáticos de Madrid. Él, ataviado con botas, una camiseta de encaje y un minúsculo bañador-slip, hace su modelaje entre la espesa capa de nieve de Morella. Frío, sí, pero el show debe continuar.

Retrocedemos. Ahora tiene 28 años. Con 23 decidió irse de Venezuela. Lo dejó todo atrás. Familia, amigos de su pueblo, Portuguesa, en el interior del país, sus estudios de ingeniería civil... "Tenía la sensación de que mi juventud se me estaba yendo. Tenía que salir en busca de un sueño, labrarme un futuro". Tras pasar por Colombia, Ecuador y Perú cruzó el Atlántico y llegó a España, a Valencia.

"Allí conocía los duelos de Casa Pere, un restaurante de Morella. Necesitaban a alguien para ayudarles con la limpieza del local. Y allá me fui. Hasta hoy. Y creo que echaré raíces aquí. En Morella la gente me hace sentirme como en casa", dice José, a pesar de que cualquier parecido entre la capital de Els Ports y la Venezuela que conocía es pura coincidencia.

Sigue en la hostelería, pero ahora en el Quedequé, un pequeño restaurante morellano. Allí, tras la barra, tiene la mejor escuela para intentar adaptar su humor, con claros arquetipos caribeños, a lo que gusta en España. "Aquí el humor es diferente e intento adaptarme poco a poco. Escucho a los clientes, tomo notas. Política o todo lo relacionado con el coronavirus, como las cuarentenas, son temas que, pese a su seriedad, siempre son motivo de chascarrillo", explica Yuyitoflow, que ha creado un universo de ficción en torno a tres personajes.

Una madre, su hija y una sobrina son los personajes en los que José Castellanos muta a la hora de confeccionar su vídeos y contar divertidas historias en Instagram y Facebook. Esa vocación artística no es nueva. En Venezuela estudié arte y danza de pequeño. "El año pasado, cuando empezó el confinamiento me dio por retomar la actuación. Fue generándose cierto interés, empecé a ganar nuevos seguidores...", y ahora es uno de los rostros más famosos de Morella, donde ha encontrado gran receptividad a su humor. "Incluso la gente me da ideas o me ayuda a conseguir la ropa para mis outfits", apunta.

Mientras proyecta varias colaboraciones en el mundo del humor, "con amigos de Madrid o, por internet, al otro lado del océano", José tiene otro reto: "Me gustaría hacer humor en valencià". Todo es proponérselo. Suerte.