Una lluvia de críticas caen estos días sobre el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, después del polémico discurso que pronunció la noche del pasado sábado ante el Consejo Nacional Palestino, órgano legislativo de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), que ha sido calificado de «antisemita» por las autoridades israelís. En su alocución, Abás afirmó que los pogromos y la persecución de los judíos en Europa fueron resultado de «cuestiones sociales» y «financieras» y no a causa del antisemitismo.

El líder palestino señaló además que los judíos que viajaron a Europa «fueron sometidos a masacres de un país a otro cada diez o quince años desde el siglo XI hasta el Holocausto en Alemania» y citó a «tres historiadores judíos» que aseguran que «el odio hacia los judíos no fue por su religión, sino por su función en la sociedad, que tenía que ver con la usura, los bancos y esas cosas». «La mejor evidencia de esto es que había judíos en países árabes, ¿por qué no hubo ningún solo incidente contra los judíos solo por ser judíos? Os reto a encontrar un solo incidente contra los judíos solo por ser judíos en 1.400 años en un país árabe», agregó.

También dijo que fue Adolf Hitler quien impulsó la migración judía a Palestina en 1933, con la firma de un acuerdo con el Banco Judío Anglo-Palestino para que pudieran trasladar allí sus fondos. «Aquellos que buscaban un Estado judío no eran judíos», aseguró.

El primer ministro israelí, Beniamin Netanyahu, no tardó en reaccionar a las afirmaciones de Abás y las calificó de «antisemitas» y le acusó de «negacionista». «Con enorme ignorancia e insolencia, (Abás) afirmó que los judíos de Europa fueron perseguidos y asesinados no porque fueran judíos, sino porque se dedicaban a préstamos con interés», dijo Netanyahu a través de su portavoz. El embajador de EEUU en Israel, el judío David Friedman, dijo que Abás «nunca había caído tan bajo».

Las críticas a Abás llegaron también desde la Unión Europea, que advirtió que son «inaceptables». El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, por su lado, rechazó las declaraciones del presidente de la ANP al tiempo que recordó el compromiso de Alemania contra el antisemitismo. Alemania «asume su responsabilidad sobre el más cruel crimen de la historia de la humanidad», agregó Maas.