Salah Abdeslam, presunto responsable logístico de los atentados yihadistas del 13 de noviembre en París, comparece este viernes ante los jueces instructores, que pretenden aclarar su implicación en este primer interrogatorio tras el que sirvió para su inculpación en el momento de su traslado a Francia.

Abdeslam llegó poco antes de las 08.00 hora local (06.00 GMT) al Palacio de Justicia de París en un convoy rodeado de fuertes medidas de seguridad, y que incluyó un helicóptero que estuvo sobrevolando el barrio desde primera hora de la mañana.

El presunto terrorista había viajado desde la prisión de Fleury Merogis, a una treintena de kilómetros de la capital francesa, en un todoterreno custodiado por varios vehículos de policía, mientras varios agentes realizaban rondas en los alrededores del Palacio de Justicia, algunos de ellos con perros olfateadores capaces de detectar explosivos.

Detenido el 18 de marzo en Bruselas y transferido a Francia el 27 de abril, es el único de los autores materiales de los atentados del 13 de noviembre en París que se encuentra entre rejas.

PARTICIPACIÓN CLAVE EN LOS ATAQUES

Según las investigaciones, que fue él quien condujo a los tres terroristas que se hicieron estallar en el Estadio de Francia donde se jugaba el partido de fútbol Francia-Alemania, y donde mataron a una persona.

También fue él quien se encargó del alquiler de coches utilizados para los ataques, así como de habitaciones de hotel y de un piso que sirvieron de alojamiento a los autores de los atentados.

Abdeslam ante el juez belga, tras su arresto, minimizó su papel, derivando responsabilidades en su hermano Brahim, uno de los terroristas que se hizo saltar por los aires con explosivos la noche del 13 de noviembre tras haber participado en el tiroteo de varias terrazas de bares y restaurantes de París.

A su llegada a Francia el 27 de abril, se mostró muy parco ante el magistrado que lo inculpó, pero su abogado dijo entonces que daría explicaciones más adelante.