Un buen número de académicos y activistas han hecho un llamamiento a las autoridades de Estados Unidos para que lleven a cabo una completa auditoría del escrutinio de votos de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 8 de noviembre, en el caso de que se demuestre que los resultados pudieron haber sufrido algún tipo de manipulación por hackers extranjeros, en concreto rusos. La sospecha recae principalmente en tres de los estados clave y más disputados, Wisconsin, Pensilvania y Michigan, informa el diario británico 'The Guardian'

El grupo de activistas, que han pedido a Hillary Clinton que se sume a su propuesta, está preparando un detallado informe de 18 páginas sobre sus sospechas, que será entregado la semana que viene a un comité del Congreso y a las autoridades federales.

ROBO DE CORREOS ELECTRÓNICOS

El interés por revisar los resultados sobrevino tras la sorpresa que produjo en muchos la derrota de Clinton frente al presidente electo Donald Trump, precedida por la revelación de los servicios de inteligencia estadounidense de que los hackers rusos estuvieron detrás de intrusiones en los sistemas informáticos electorales regionales y del robo de correos electrónicos de funcionarios demócratas antes de las elecciones.