El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha alertado de una "grave" falta de fondos para atender a los desplazados y refugiados que han abandonado sus hogares en Siria, ya que por ahora la agencia solo ha recibido el 31% de los 1.970 millones de dólares (1.700 millones de euros) solicitados para sus proyectos de 2018.

La organización ha recibido 610 millones de dólares y, según su portavoz, Babar Baloch, necesita "urgentemente" 270 millones de dólares para "garantizar que los más vulnerables de entre los refugiados y desplazados internos no se quedan sin la protección y la asistencia vital este año".

La mayor parte de esta cantidad, 196,5 millones de dólares, permitiría a ACNUR continuar con "programas esenciales" en Turquía, Líbano, Jordania, Irak y Egipto. En la región hay registrados 5,6 millones de refugiados, de los cuales 2,6 millones son niños, ha recordado la agencia en un comunicado.

MÁS INCERTIDUMBRE

"Es imperativo evitar más sufrimiento y más incertidumbre a una población que ya ha soportado mucho", ha añadido Baloch, que ha recordado la necesidad de ayudar a quienes se han visto abocados a abandonar sus hogares de cara al inminente invierno.

Además, la crisis de desplazamiento aún podría empeorar si finalmente el régimen de Bashar al Assad cumple su amenaza y lanza una ofensiva militar sobre Idlib, en el noroeste de Siria. Los primeros bombardeos han provocado ya más de 30.000 desplazados, según la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).