Joshua Wong, el joven activista prodemocracia de Hong Kong, fue detenido por las autoridades de Tailandia nada más llegar al aeropuerto de la capital Bangkok.

Las alarmas saltaron en las redes sociales cuando Nathan Law, compañero de Wong en el partido fundado por ellos (Demosisto), expresó su preocupación por la seguridad del activista: “No estamos seguros de en qué circunstancias se le ha detenido”.

Wong había viajado a Tailandia invitado por el activista local Netiwit Chotipatpaisal, para participar en los actos del 40 aniversario de la matanza de estudiantes prodemocracia de la universidad de Thammasat, previsto para este jueves.

Wong, que es secretario general del Demosisto, pasó más de doce horas en poder de las autoridades de inmigración tailandesa, antes de ser puesto en un avión y deportado de regreso a Hong Kong.

LA MANO INVISIBLE DE CHINA

Maya Wang, responsable de ‘Human Rights Watch’ en Asia, sugiere que la detención de Wong demuestra la presencia de la mano invisible de China: “Por desgracia Bangkok está dispuesto a hacer lo que le pida Pekín”.

Tailandia vive bajo gobierno militar desde el golpe de Estado del 2014. Desde entonces, los opositores han denunciado una serie de hechos que evidenciarían la injerencia de Pekín en el país.

El Gobierno chino eludió confirmar si había reclamado a las autoridades tailandesas el arresto de Wong. Se ha limitado a decir en nota de prensa que estaba informado sobre lo ocurrido y que respeta la soberanía tailandesa en temas de migración.

El portavoz del ministerio tailandés de exteriores ha dicho que el Gobierno no prohíbe la expresión de opiniones personales sobre la situación política en el país y que la decisión se tomó por múltiples factores.

Agnes Chow, la vice secretaria general del Demosisto ha dicho: “Nosotros creemos que el gobierno chino está usando de todos los medios posibles para impedirnos de llevar la lucha por la democracia de Hong Kong para otros países”.

LA REVOLUCIÓN DE LOS PARAGUAS

El 2014 miles de estudiantes ocuparon el centro financiero de Hong Kong para protestar por democracia y una reforma electoral en esta región administrativa de la Republica Popular de China.

El movimiento se hizo famoso en el mundo por su resistencia no violenta. Los manifestantes llevaban paraguas y sonbrillas para protegerse del Sol y el objeto acabó por convertirse en el símbolo del movimiento. Wong era uno de sus líderes.

Wong y otros compañeros fundaron el partido Demosisto para concurrir a las elecciones del parlamento de Hong Kong. Wong es secretario general del partido y Nathan Law fue elegido diputado en las elecciones del pasado cuatro de septiembre.