Al menos 386 refugiados e inmigrantes devueltos a Turquía frente a 7.959 llegados a Grecia desde el pasado 20 de marzo, según las cifras del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR). Si lo que se pretendía era frenar la llegada de migrantes a suelo comunitario, el cuestionable acuerdo migratorio entre Bruselas y Ankara, puesto en marcha hace ahora dos meses, no apunta precisamente hacia el éxito.

El momento, además, es tenso, con la Unión Europea (UE) yTurquía enganchados sobre el levantamiento de visados Schengen para los ciudadanos turcos, que amenaza con hacer que el tratado se vaya al garete en cualquier momento. Para acceder a la contrapartida de los visados, Turquía debe acometer 72 reformas que igualen sus estándares a los europeos, y la mayoría de ellas se han llevado a cabo. No obstante, desde hace semanas una reforma de la legislación antiterrorista turca impide que se avance en el proceso. Ankara arguye que no puede modificar esta norma en la actual circunstancia de seguridad, mientras que Bruselas quiere que las autoridades turcas acoten el término, demasiado amplio y que está sirviendo también al cada vez más autoritario presidente, Recep Tayyip Erdogan, para mermar los movimientos opositores y la prensa no afín.

SE VA DAVUTOGLU, EL NEGOCIADOR

Asimismo, el AKP de Turquía ha elegido este jueves como candidato a liderar el partido y suceder a Ahmet Davutoglu en el cargo de primer ministro a Binali Yildirim, actual ministro de Transportes y fiel a la línea dura de Erdogan. Davutoglu había sido una de las caras más amables del régimen turco y había participado activamente en todo el proceso negociador de este pacto.

Pero desde Ankara restan importancia a estos factores. “El mecanismo de readmisión está funcionando. El número de refugiados que llegan a las islas griegas ha descendido desde 6.000 a menos de un centenar (al día). Esto ha sucedido por una vigorosa puesta en práctica (del acuerdo) y porque los refugiados han entendido que serían devueltos incluso si sobreviven al viaje”, aseguran a este diario fuentes gubernamentales turcas que prefieren el anonimato. “El principal cuello de botella es Grecia. Nosotros (Turquía) no estamos recibiendo mucha gente”, agregan.

El proceso de las solicitudes de asilo en Grecia es, en efecto, uno de los grandes cuellos de botella del sistema, ya que no se ha dotado al país heleno del personal necesario para procesar estas peticiones de manera más ágil.

“Desde el 20 de marzo hasta el 12 de mayo, 100 solicitudes de asilo se han considerado inadmisibles (es decir, se ha juzgado que los solicitantes podríaN regresar a Turquía de manera segura). Y 98 de ellas están pendientes de una decisión final en segunda instancia, después de una apelación a la primera”, indica a este diario Anna Spertou, de la Secretaría General de Información del Gobierno griego. No obstante, la fuente no detalló cuántas de estas solicitudes habían sido aceptadas hasta la fecha.

HACINADOS EN CONDICIONES INFRAHUMANAS

Tampoco ayuda a relajar la precaria situación en Grecia -donde miles de solicitantes de asilo están hacinados en precarias condiciones humanitarias- el hecho de que los propios países de la UE no estén cumpliendo con las cuotas de acogida solicitadas por la Comisión Europea (CE). El objetivo de la CE planteado hace dos meses de que los países miembro hubieran acogido a 20.000 refugiados para mitad de mayo se ha cumplido solo al 3%: 563 personas. La oposición a la acogida, especialmente entre los países del este europeo, está poniendo en serias dificultades al bloque.

Por su parte, diversas oenegés han atizado por igual a Turquía y la UE por incumplir la legalidad nacional e internacional desde la puesta en marcha del acuerdo. Mientras que Amnistía Internacional denunció el maltrato e incluso el asesinato de refugiados procedentes de Siria por parte de gendarmes turcos, Médicos Sin Fronteras reclamó la apertura de los centros de detención de refugiados, donde permanecen encerrados mucho más tiempo del previsto por la ley y en condiciones deplorables.

LAS CIFRAS DEL ACUERDO

-386 inmigrantes han sido devueltos de Grecia a Turquía desde el 20 de marzo, momento de la puesta en marcha del controvertido acuerdo migratorio entre Bruselas y Ankara.

-7.959 solicitantes de asilo han llegado a Grecia desde esa fecha.

-100 peticiones de asilo han sido rechazadas en primera instancia por las autoridades griegas.

-563 refugiados (de los 20.000 inicialmente propuestos) han sido acogidos por países de la Unión Europea en los últimos dos meses.