La localidad alemana de Reinfeld (norte) se ha despertado en la mañana del martes con una impactante operación policial cuando hasta 200 agentes de la unidad antiterrorista han irrumpido en un centro de acogida de refugiados para detener a tres sospechosos de formar parte del grupo terrorista autoproclamado Estado Islámico(EI) y de querer preparar un ataque en Alemania.

Al mediodía las autoridades federales han añadido que presuntamente los tres detenidos, de nacionalidad siria, tienen alguna vinculación con los atentados terroristas perpetrados en noviembre del año pasado en París, en los que 130 personas fueron asesinadas. “Hay razones para creer que los tres arrestados utilizaron la misma red de tráfico que los terroristas de París”, ha asegurado el ministro del Interior, Thomas de Maizière.

La fiscalía ha identificado a los detenidos como Mahir al-H., de 17 años, Ibrahim M., de 18, y Mohamed A., de 26. Al parecer, los tres abandonaron Siria en octubre del año pasado y siguieron la misma ruta que los refugiados a través de Turquía y Grecia para llegar al corazón europeo a mediados de noviembre y instalarse entonces en esta localidad del estado de Schleswig-Holstein.

Según los datos proporcionados por la Oficina Federal del Crimen (BKA por sus siglas en alemán), los falsos pasaportes utilizados por los detenidos provienen del “mismo taller” que los de los autores de la masacre en la capital francesa. De Maizière ha remarcado que la policía seguía a los presuntos terroristas desde hacía meses y que sus teléfonos estaban pinchados para saber si preparaban un atentado o estaban esperando órdenes de un comando superior de Estado Islámico. Así, ha querido evitar lanzar el mensaje de alarma de que un atentado en Alemania era posible.

ATACAR O ESPERAR ÓRDENES

La fiscalía alemana ha asegurado que el más joven de los detenidos, Mahir al-H., se alistó a las filas de Estado Islámico en septiembre del 2015, un mes antes de emprender su ruta hacia Alemania. En Raqqa, la autoproclamada capital del califato salafista, fue entrenado en el uso de las armas y los explosivos.

El mismo octubre los tres detenidos juraron lealtad al Daesh, como también se conoce al grupo terrorista. “Los acusados debían viajar a Europa para ejecutar un ataque o esperar órdenes”, han insistido las autoridades judiciales en un comunicado. Para ello fueron apoyados con dinero, móviles y pasaportes falsos.

NO CRIMINALIZAR A LOS REFUGIADOS

De Maizière ha querido insistir en que esta operación no debe manchar el nombre de los miles de personas que han llegado a Alemania huyendo de la guerra. Consciente de como los populistas xenófobos han utilizado este argumento para criticar la apertura de puertas impulsada por la cancillera Angela Merkel, el ministro ha remarcado que no se debe criminalizar a los refugiados ni tenerlos bajo sospecha terrorista.

Según ha apuntado el diario 'Der Welt'' la policía también ha realizado inspecciones en otros refugios de esta ciudad, 56 kilómetros al noroeste de Hamburgo.