Las ciudades son parte del problema y también parte de la solución en los retos globales del planeta. Así lo han subrayado las alcaldesas de Barcelona, Madrid y París, Ada Colau, Manuela Carmena y Anne Hidalgo, respectivamente, que han impulsado un manifiesto conjunto en las puertas de la celebración de Conferencia Mundial Hábitat III, que se celebra en Quito entre el 17 y el 20 de octubre.

La cumbre mundial, que se organiza cada 20 años, fijará las prioridades de la Nueva Agenda Urbana para las próximas décadas. Es una conferencia de Estados, por primera vez se ha reconocido formalmente la participación de la Asamblea de Gobiernos Locales, a través de la cual las ciudades influirán en la definición de la nueva agenda.

Colau, Carmena e Hidalgo defienden que las ciudades no pueden tener únicamente un papel de observadoras y destacan la capacidad de estas para cooperar e innovar. "Estamos ante un cambio de época", afirman en el manifiesto, donde proponen a los Estados que abran los mecanismos de gobernanza y establezcan los mecanismos de evaluación y seguimiento de la agenda urbana en las ciudad.

Barcelona, Madrid y París afirman que los países deberían asegurar los recursos suficientes para que las ciudades puedan desarrollar sus políticas de manera eficiente, destinando al menos un 25% la financiación de los gobiernos locales. A su vez, los fondos globales y europeos deberían permitir a las ciudades acceder a los mecanismos de financiación actualmente restringidos a los Estados.