El grupo yihadista Boko Haram ha hecho llegar a los negociadores y algunos miembros del Gobierno de Nigeria un vídeo de dos minutos como "prueba de vida" de 15 de las estudiantes que secuestró hace este jueves justo dos años en una escuela de Chibok (noreste de Nigeria), en el que una de ellas afirma que el momento de la grabación era presuntamente el 25 de diciembre del 2015.

Las imágenes, obtenidas por CNN, fueron mostradas a los padres de las chicas y en el vídeo se ve a cada joven identificarse y decir que procedían de la escuela de educación secundaria de Chibok. Todas aparecen con el cabello cubierto y con túnicas largas sin mostrar señales aparentes de maltrato.

La fecha proporcionada por una de las chicas coincide con la información que aparece en el vídeo, lo que sugiere que fue filmado el día de Navidad, aunque se desconoce si eso es cierto o si el día fue escogido de forma deliberada.

IDENTIFICACIÓN DE ALGUNAS MADRES

Tres de las madres de las escolares secuestradas afirmaron haber identificado a sus hijas en este vídeo, en lo que podrían ser las primeras imágenes de las niñas desde mayo del 2014, cuando Boko Haram hizo pública otra filmación, informaron medios locales.

Las autoridades locales advirtieron de que es necesario realizar más identificaciones, ya que en el pasado los radicales han dado pistas falsas que no han permitido conocer el paradero ni rescatar a las secuestradas hasta el momento.

El 14 de abril del 2014, un total de 276 niñas cristianas fueron secuestradas en una escuela de educación secundaria de Chibok durante un asalto violento perpetrado por miembros de Boko Haram.

INTENSIFICAR ESFUERZOS

Siete expertos en derechos humanos de la ONU y de África han instado a Boko Haram a que revele "inmediatamente" la ubicación de las niñas secuestradas hace casi dos años en una escuela de Chibok y las libere junto con otros cientos de civiles capturados, y al Gobierno nigeriano a que intensifique sus esfuerzos para que vuelvan a la libertad las personas raptadas por el grupo terrorista.

Por su parte, Human Rights Watch (HRW) ha afirmado en un informe que los ataques de Boko Haram contra escuelas, estudiantes y profesores en el noreste de Nigeria han provocado que cerca de un millón de niños tengan "poco o ningún acceso a la escuela", mientras las fuerzas de seguridad del país han contribuido a este problema al utilizar colegios como bases militares.

CRUZADA CONTRA LA EDUCACIÓN OCCIDENTAL

El informe documenta ataques cada vez más brutales de Boko Haram contra escuelas, estudiantes y profesores desde el 2009 en los estados nigerianos de Borno, Yobe y Kano. En los últimos seis años, este grupo yihadista destruyó más de 910 colegios y obligó a al menos a otros 1.500 a cerrar sus puertas, asesinó deliberadamente a al menos 611 maestros y obligó a otros 19.000 a huir, y secuestró a más de 2.000 civiles, muchos de ellos mujeres y niñas, además de grupos de estudiantes.

"En su brutal cruzada contra la educación de estilo occidental, Boko Haram está robando a toda una generación de niños del noreste de Nigeria su educación", dijo Mausi Segun, investigadora de HRW en Nigeria, quien apuntó que "el Gobierno deberá ofrecer inmediatamente la educación apropiada a todos los niños afectados por el conflicto".

USO DE MENORES EN ATENTADOS SUICIDAS

El informe de HRW coincide con la reciente publicación de otro realizado por Unicef, según el cual el número de ataques suicidas perpetrados por menores y atribuidos a Boko Haram se ha multiplicado por diez en el último año. Unicef denunció que de cuatro niños utilizados en ataques kamikazes en el 2014 se pasó a 44 al año siguiente, según los datos recogidos en Nigeria, Camerún, Chad y Níger, países en los que actúa esta organización yihadista afiliada al Estado Islámico (EI).

Más del 75% de estas víctimas infantiles son niñas, remarcó Unicef en su informe 'Más allá de Chibok', publicado con motivo del segundo aniversario del masivo secuestro de Chibok, que en su día suscitó una ola de indignación mundial que impulsó la campaña en las redes #BringBackOurGirls.