La Unión Europea ha recomendado este lunes a los países miembros confinar todas las zonas que superen una incidencia acumulada superior a los 500 casos por 100.000 habitantes. España es uno de los países en los que casi la totalidad del territorio estaría por encima de este umbral. Asimismo, ha propuesto a los veintisiete que recomienden no viajar a los ciudadanos dentro y fuera de sus fronteras ante la alta incidencia del coronavirus.

"La primera recomendación es no viajar", ha zanjado la comisaria de Interior, la socialista sueca Ylva Johansson, en una rueda de prensa en Bruselas para presentar los detalles de una propuesta que en líneas generales ya adelantó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, el pasado jueves tras reunirse con los jefes de Estado y de Gobierno de la UE.

Según una recreación mostrada en la misma comparecencia por el comisario de Justicia, Didier Reynders, si se incorpora el cuarto color a la clasificación de riesgo que ya publica periódicamente el Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC) habrá una decena de países que ya tendrían parte de su territorio tintado de rojo oscuro, incluido todo el territorio de España.

Bruselas, que no tiene competencias en materia sanitaria ni en gestión de fronteras, iniciará este mismo lunes las negociaciones a nivel técnico con los Estados miembro para lograr "cuanto antes" un consenso que los Veintisiete se comprometan a seguir, aunque las autoridades nacionales seguirán teniendo la última palabra a la hora de aplicar o no las recomendaciones.

El Ejecutivo comunitario cree que los desplazamientos innecesarios "no deben producirse en absoluto" desde o hacia regiones que superen el umbral de las 500 infecciones por cada 100.000 en el periodo de catorce días, según ha dicho la comisaria, y recomienda que las personas que finalmente se desplacen en viajes considerados "esenciales" se sometan a una prueba PCR antes de partir y respeten una estricta cuarentena de catorce días una vez llegadas al destino.