El primer ministro británico, David Cameron, ya está en la sede del Consejo Europeo donde tiene previsto un encuentro bilateral con el presidente de la UE, Donald Tusk, antes del inicio de la cumbre en la que deberá explicarse por primera vez ante el resto de colegas europeos por el caos político que ha generado en Reino Unido y en toda la Unión Europea. El líder conservador ha llegado a la cita pidiendo un proceso “constructivo” y ha defendido que aunque haya divorcio espera que sea “sin dar la espalda a Europa”.

“Aunque dejemos la Unión Europea no debemos dar la espalda a la UE porque estos países son nuestros vecinos, amigos, aliados, socios, y espero que busquemos la relación más estrecha posible en comercio, cooperación y seguridad porque es bueno para nosotros y para ellos”, ha defendido en línea con la Europa a la carta que buscan los británicos. Cameron, que se ha entrevistado este mediodía con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, no se ha pronunciado, sin embargo, sobre cuándo piensa activar el proceso de divorcio regulado en el artículo 50 del Tratado y que las principales instituciones europeas exigen cuanto antes.

“La Unión Europea está dispuesta a iniciar hoy mismo el proceso de divorcio, aunque no nos entusiasme”, le recordaba el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, poco antes de recibirle en su despacho. Los líderes europeos asumen que Cameron no cursará la notificación en la cumbre de este 28 y 29 de junio pero insisten en que es un prerrequisito si el gobierno británico quiere cumplir con la voluntad del pueblo. “Tenemos que respetar los tratados y según los mismos es el gobierno británico quien debe iniciar el procedimiento”, recordaba. “Es la única vía legal y todo el mundo tiene que ser consciente”.

SER PACIENTES

Tusk asume, no obstante, que Londres se dará tiempo y apuesta por ser “pacientes” aunque el escenario no les guste. “Quiero subrayar que sin la notificación de Reino Unido no empezaremos las negociaciones del proceso de divorcio sobre una futura relación”, ha subrayado anunciando que la reunión de este 28 de junio, sin Cameron, en la mesa no será decisiva para definir el futuro de la UE sin Reino Unido a bordo. Según el polaco, los líderes europeos necesitan “unas semanas” para evaluar la situación de ahí su intención de convocar una nueva reunión informal tras el parón estival. Será en el mes de septiembre y en Bratislava, capital de Eslovaquia que asumirá este 1 de julio la presidencia semestral de la Unión Europea.