Akayed Ullah, detenido tras el atentado fallido del lunes en Nueva York, fue imputado ayer con cinco cargos federales de terrorismo, que incluyen dar apoyo a una organización terrorista, el Estado Islámico (EI), y el uso o el intento de uso de un arma de destrucción masiva, el artefacto explosivo que construyó y que falló cuando quiso hacerlo estallar en un túnel de la red de metro cerca de Times Square. A esas imputaciones se suman cargos locales.

Originario de Bangladés y residente permanente en EEUU, Ullah permanece hospitalizado por las heridas que se provocó a sí mismo al detonar su bomba casera. Ullah dijo que planeó el ataque como una venganza por bombardeos contra el EI en Siria y otros lugares. También que lo quería realizar en temporada navideña para tener el máximo impacto. Ha contado a los investigadores que se radicalizó en internet, donde también investigó cómo construir la bomba. La montó en su casa en Brooklyn con materiales que compró, salvo el trozo de tubería, que encontró en un lugar donde estaba trabajando como electricista cerca de donde intentó el atentado.

«AMÉRICA, MUERE EN TU IRA» / Las autoridades bangladesís informaron de que Ullah no tenía allí historial delictivo. Su radicalización comenzó al menos hace tres años. Hace uno empezó a investigar cómo construir la bomba, algo que hizo la semana pasada. En Facebook, antes del atentado, escribió: «Trump, has fracasado en proteger tu nación». En su pasaporte había escrito: «Oh, América, muere en tu ira».

Ullah llegó a EEUU en el 2011 con un visado de reagrupación familiar y luego logró la residencia permanente. Su historial migratorio fue usado el lunes por el presidente Donald Trump para reactivar su apelación al cierre de fronteras. También reiteró su opinión de que «los condenados por actos de terrorismo merecen el castigo más contundente que permite la ley, incluida la pena de muerte en los casos apropiados».