Cerca de 50.000 personas de la isla turística de Bali han sido evacuadas estos últimos días antes el aumento de la actividad sísmica del volcán Agung, situado a 75 kilómetros de la localidad turística de Kuta. El Agung ruge desde el pasado mes de agosto y ha sido este viernes cuando las autoridades indonesias han suelto decretar el nivel de alerta máxima.

Las personas evacuadas han sido realojadas en centros de acogida o en casas de familiares. "Hay gente que se niega a ser evacuada", ha dicho un portavoz gubernamental. "Argumentan que el volcán todavía no ha hecho erupción y dicen estar preocupados por su ganado", ha añadido. Unas 2.000 vacas se encuentran alrededor del monte Agung.

El aeropuerto internacional de Denpasar, la capital de Bali, que acoge cada año a millones de tutistas, permanece de momento abierto, aunque las autoridades no descartan cerrarlo si las situación lo requiere. En el mes de noviembre del 2015, el aeropuerto cerró temporalmente debido a la erupción de un volcán en la isla vecina de Lombok.

CINTURÓN DE FUEGO

La última erupción del Agung se produjo en 1963 y provocó la muerte a más de un millar de personas. Indonesia está situada en el "cinturón de fuego" del Pacífico, donde la colisión de placas tectónicas provoca frecuentes seísmos y una importante actividad volcánica.