La sala de conciertos Bataclan, en la que el 13 de noviembre del año pasado fallecieron 90 personas durante la oleada de ataques yihadistas en París, reabre este sábado totalmente renovada con un concierto de Sting. Las entradas se agotaron en un santiamén.

"Un año después de los ataques, Francia y todo el mundo verá que el Bataclan vive de nuevo", ha declarado Jérôme Langlet, el jefe de la empresa propietaria.

Está previsto que el exlíder y vocalista de The Police salga al escenario hacia las nueve de la noche y que pronuncie en francés unas palabras en homenaje a las víctimas.

Los 1.000 asientos subastados el martes se vendieron en menos de 30 minutos. La sala tiene una capacidad para 1.497 personas, pero se han reservado diversas entradas para familiares de las víctimas.

Sting no recibirá ningún pago por su concierto en el Bataclan, sino que serán dos asociaciones representantes de las víctimas -Life for Paris y 13 Novembre: Fraternité Verité- quienes recojan los beneficios. El cantante británico, de 65 años, que actuó en Bataclan con The Police en un memorable concierto el 23 de abril de 1979, se ha comprometido a "respetar la memoria de los que murieron."

Además, el domingo habrá en el mismo escenario también una ceremonia de homenaje en la que participarán los Eagles of Death Metal, la banda estadounidense que tocó esa trágica noche y que también pasó por la sala Apolo de Barcelona el pasado septiembre.