El líder laborista británico, Jeremy Corbyn, ha señalado hoy en la convención de su partido celebrada en Liverpool que preferiría una elección nacional para un segundo referéndum sobre Brexit. La conferencia anual laborista debe refrendar la idea y Corbyn dijo que estaría obligado a interpelar al gobierno de Theresa May por lo que acaben decidiendo hoy los miembros. "Nuestra preferencia sería una elección general y luego podemos negociar nuestra relación futura con Europa, pero veamos qué sale de la conferencia", dijo a BBC TV.

Corbyn dijo que si los laboristas negociaran con Bruselas buscarían un acuerdo comercial con una unión aduanera con la UE, por lo que no era necesario que fuera una frontera dura en Irlanda, uno de los principales puntos de fricción en las conversaciones del Brexit.

El líder laborista también aprovechó para señalar que no se considera un antisemita y que está totalmente en contra de cualquier tipo de racismo. Estas declaraciones responde a la polémica suscitada a principios de mes tras la dimisión del veterano diputado Frank Field. En su adiós, Field acusó a la dirección del partido de estar convirtiéndose en “una fuerza de antisemitismo en la política británica”.