Una gigantesca nube de humo blanco ha envuelto este martes la ciudad de Sídney en una densa niebla tóxica proveniente de los incendios que están devastando la costa este de Australia desde el viernes pasado.

Según informes oficiales, los niveles de contaminación han alcanzado cotas "peligrosos" en la ciudad, comparables a los observados recientemente en la capital india, Nueva Deli. Las autoridades australianas han aconsejado a los residentes evitar la actividad física al aire libre y que permanezcan en sus casas hasta que la niebla desaparezca para evitar intoxicaciones.

Seis personas han muerto y cientos de hogares han sido destruidos por incendios forestales en los estados de Nueva Gales del Sur y Queensland desde el comienzo de la temporada de incendios en septiembre.

MÁS RIESGO MAÑANA

Para mañana miércoles, se esperan temperaturas más altas, alrededor de 40 grados, así como fuertes vientos y baja humedad, lo que aumenta el riesgo de incendios.

Más de 110 fuegos siguen activos. Cientos de casas han sido dañadas o destruidas, y se han quemado más de un millón de hectáreas de vegetación.

Tales incendios ocurren cada año en la inmensa isla-continente durante la primavera y el verano australes. Pero este año, la temporada de incendios ha sido particularmente temprana y violenta y podría ser una de las peores registradas en el país.