Unos desconocidos han arrojado un objeto incendiario la madrugada del lunes dentro de unas casas prefabricadas en las que viven refugiados en el barrio berlinés de Pankow, según ha informado la policía. El albergue se encuentra en la calle Groscurthstrabe y ha afectado a dos módulos. Seis personas han tenido que ser atendidas por intoxicación por humo.

La policía no ha dejado claro si se ha tratado de cóckteles molotovlanzados desde el exterior, como ha informado la agencia DPA, o si el fuego ha sido provocado por los agresores desde el interior mismo del albergue. Lo que sí parece estar claro es que ha sido provocado. El servicio de defensa de la Constitución (llamado Staatschutz), encargado de investigar a los grupos extremistas, se ha hecho con el caso.

El llamado “Refugium Buch” fue abierto en abril de 2015. En total han sido afectadas por el fuego 170 de las más de 500 plazas disponibles en estas casas prefabricadas. Los refugiados víctimas del ataque tendrá ahora que ser realojados en otro lugar. El suministro de electricidad y agua ha quedado suspendido en todo el complejo.

Este tipo de edificios, compuesto por casas prefabricadas, es el modelo que la ciudad de Berlín está construyendo en todos los barrios para alojar a los más de 70.000 refugiados que llegaron a Berlín en 2015. Muchos de ellos aún permanecen en refugios de emergencia, pensados para los primeros tres meses. Hasta el fin del verano según el senado berlinés, se vaciarán las decenas de pistas deportivas que hacen las veces de albergue.

En abril de 2015, cuando los primeros solicitantes de asilo se mudaron al refugio de Pankow que ardía el lunes, tuvieron que hacerlo protegidos por la policía, ya que a la entrada había una pequeña protesta de neonazis. Un día después tenía lugar una manifestación en contra del albergue de la extrema derecha.

CONSIGNAS XENÓFOBAS

Y dos semanas antes, un grupo de personas -después se sabría que ligadas al partido de extrema derecha NPD- gritaban consignas xenófobas y atacaban con una botella de cristal rota al personal de seguridad que vigilaba la obra donde poco después se levantaron las casas prefabricadas.

Los ataques xenófobos han aumentado en el último año en la capital alemana. En algunos barrios, como Marzahn-Hellersdorff, incluso se han triplicado. El barrio donde se ha producido el incendio el lunes también se encuentra en una parte de la ciudad que pertenecía a la Alemania del Este y donde tienen lugar más ataques de este tipo.

Según la ONG Reach Out en 2015 se produjeron en la capital hasta 320 ataques, la mayoría de ellos insultos y pintadas neonazis, lo que supondría un aumento de hasta un 80%. 412 personas fueron heridas o insultadas, en 96 casos de gravedad. La cifra anterior también contempla ataques contra albergues para refugiados. Si en todo 2015 según datos policiales se registraron 56 ataques contra albergues de refugiados, solo en los primeros seis meses de 2016 han sido 43.