El primer ministro designado de Irak, Mohamed Taufiq Alaui, renunció a su candidatura para liderar el nuevo Ejecutivo del país por la "falta de seriedad" de los partidos políticos y la falta de cuórum en el Parlamento, que ha llevado a retrasar la votación hasta dos veces en una misma semana.

"Entre que no hubo cuórum dos veces consecutivas y las campañas de falsificación de verdades (...) permítame que le presente a su Excelencia mi renuncia del cargo. Ruego que la acepte", dijo Alaui en un discurso a la nación dirigido al Presidente iraquí, Barham Saleh.

Obstáculos para el nuevo Gobierno

En su discurso, Alaui hizo referencia a las presiones a las que ha estado sujeto por determinados partidos, a los que no mencionó, para que les otorgara puestos en su nuevo gabinete y que para ello, "impusieron obstáculos ante el nacimiento de un Gobierno independiente".

"Desgraciadamente, algunas partes estaban solamente negociando por conseguir intereses, sin sentimientos por la causa nacional y sin tener en consideración la sangre de los mártires que se derramó en las plazas de las protestas para cambiar la situación y conseguir la prosperidad de la patria", lamentó el primer ministro designado.

Más de dos meses después de la dimisión del primer ministro Adel Abdelmahdi, en medio de las protestas que sacuden Irak desde el pasado 1 de octubre y que han dejado al menos 550 muertos, Alaui fue designado el 1 de febrero, gracias al apoyo de la coalición mayoritaria en el Parlamento, Sairún, apadrinada por el influyente clérigo chií Muqtada al Sadr.

Conflictos políticos

Sin embargo, durante las últimas semanas la formación de un Gobierno ha sido misión imposible por la pelea entre distintos partidos por conseguir ministerios y por llamada boicot de los principales partidos suníes y kurdos del Legislativo, que consideraron a Alaui "inadecuado" para hacer frente a los problemas que atraviesa Irak.

Asimismo, la candidatura de Alaui también fue rechazada por los manifestantes porque consideran que el político, que ejerció como ministro de Telecomunicaciones en anteriores gobiernos, fracasó en la lucha contra la corrupción cuando tuvo puestos de responsabilidad.

Procedimientos complejos

Durante el discurso, Alaui apuntó que su decisión fue clara cuando se encontró ante la disyuntiva de seguir con su candidatura "a costa del sufrimiento de la gente" o "estar con el pueblo" y renunciar ante la "falta de seriedad de las partes políticas con la reforma y con el cumplimiento de las promesas al pueblo".

Tras la renuncia del primer ministro designado, la Presidencia iraquí emitió un comunicado en el que especificaba que Saleh empezará a partir de mañana y a lo largo de 15 días un proceso de consultas para asignar a un candidato alternativo, de acuerdo con los plazos establecidos por la Carta Magna.

"El Presidente (...) llama a las fuerzas del Parlamento a que trabajen seriamente para llegar a un acuerdo nacional sobre el nombramiento de un primer ministro alternativo y aceptado por el pueblo", señaló la presidencia en el comunicado.