El primer ministro de la República de Irlanda, Leo Varadkar, presentó su dimisión después de que la Cámara Baja del parlamento nacional (Dáil) no haya alcanzado un consenso para designar a un jefe de Gobierno tras las elecciones el pasado 8 de febrero.

La líder del izquierdista Sinn Féin, Mary Lou McDonald, fue la candidata con más votos, 45, si bien no logró los suficientes apoyos para ser elegida, mientras que el líder del centrista Fianna Fáil, Micheál Martin, obtuvo 41 y Varadkar, al frente del democristiano Fine Gael, sumó 36 votos.

El jefe del Ejecutivo, que continuará ocupando el cargo de manera interina hasta que sea nombrado un sucesor, presentó su renuncia durante un encuentro con el presidente del país, Michael Higgins, informó la televisión pública RTE. Asimismo evitará, en la medida de lo posible, adoptar decisiones políticas de peso y comprometer grandes partidas de fondos Varadkar, que llegó al poder en el 2017, hizo historia al ser el primer ministro gay, hijo de inmigrante, además de por su juventud.

El Parlamento irlandés se reunió el jueves por primera vez tras los comicios de hace dos semanas, en los que ningún partido logró una mayoría clara y el Fine Gael gobernante quedó relegado a tercera fuerza (20,9 % de los votos), por detrás del Fianna Fáil (22,2 %) y el Sinn Féin, antiguo brazo político del ahora inactivo IRA (24,5 %). Las formaciones han comenzado los contactos para tratar de configurar un Gobierno de coalición, pero los dos mayores partidos rechazan por ahora entrar en un Ejecutivo con el Sinn Féin.

Tras el bloqueo en el que acabó la primera sesión para tratar de designar a un nuevo primer ministro, los parlamentarios suspendieron la sesión hasta el próximo 5 de marzo, otorgando a los principales líderes un margen de dos semanas para tratar de acercar posturas.