Donald Trump ha nominado este jueves como secretario de Trabajo a Alexander Acosta, que puede ser el primer miembro hispano de su gabinete. Acosta, un nativo de Miami y titulado por Harvard que es actualmente decano de la Facultad de Derecho de la Florida International University, fue el primer hispano que llegó al cargo de asistente del fiscal general de Estados Unidos.

Acosta es el segundo nominado que Trump elige para el cargo después de haber optado por Andrew Pudzer, el millonario dueño de restaurantes de comida rápida que el miércoles anunció que se retiraba de la nominación al no contar con apoyo suficiente siquiera de los republicanos para ser ratificado. Aunque para demócratas y activistas las principales sombras en su currículo eran sus duras prácticas con sus empleados, su oposición a la subida del salario mínimo o la apuesta por la automatización, la oposición conservadora se disparó al saberse que había contratado a unaempleada del hogar indocumentada y al surgir una vieja grabación de su esposa denunciando violencia doméstica.

Acosta, que ha trabajado también en el sector privado y para un juez del Tribunal Supremo, ha superado en tres ocasiones procesos de ratificación en el Congreso. Lo hizo para el cargo de asistente del fiscal general, como fiscal de distrito en Florida y también cuando fue nombrado para el Consejo Nacional de Relaciones Laborales, en el que sirvió en la presidencia deGeorge Bush desde diciembre de 2002 hasta agosto de 2003.