El Ejército de Estados Unidos lanzó ayer un ataque aéreo contra los talibanes, el primero después del acuerdo firmado en Qatar con los insurgentes el pasado sábado. «EEUU ha llevado a cabo un ataque aéreo en Nahr-e Saraj, en la provincia de Helmand, contra los combatientes talibanes que han atacado activamente a las fuerzas de seguridad afganas. Ha sido un ataque defensivo», tuiteó ayer el coronel Sonny Leggett, portavoz de las fuerzas estadounidenses en Afganistán, ya que murieron una veintena de miembros del Ejército y de la policía afgana. «Nosotros estamos comprometidos con la paz, pero tenemos la responsabilidad de defender a nuestros compañeros afganos. Los dirigentes talibanes prometieron a la comunidad (internacional) que reducirían la violencia y no aumentarían los ataques. Hacemos un llamamiento para que cumplan sus compromisos», añadió Leggett.