El ministro español de Exteriores, Alfonso Dastis, tiene previsto preguntar «abiertamente» a las autoridades de Irán por la situación de las 29 mujeres detenidas tras quitarse el hijab, según informaron fuentes de Exteriores.

Dastis llegó anoche a Teherán para un viaje oficial de dos días en el país persa. El jefe de la diplomacia española se reunirá hoy con Alí Akhbar Velayati, consejero de Asuntos Exteriores del líder supremo, Alí Jamenei; el presidente del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, el contralmirante Alí Shamkhani, y su homólogo, el ministro de Exteriores, Mohamed Javad Zarif.

La visita se produce en un momento difícil para el régimen iraní, ya que desde diciembre ha habido protestas en varias ciudades por la situación económica. Esas manifestaciones han coincidido con el repunte de la campaña Miércoles Blancos que la activista iraní Masih Alinejad puso en marcha hace ya tres años y que invita a las mujeres a vestirse ese día de la semana con el hijab de color claro, quitárselo y grabar la escena para colgarla en las redes sociales.

La policía comunicó el mes pasado que detuvo a 29 mujeres por ese hecho. La escasa información oficial sobre este asunto y el miedo a la represión hacen imposible saber a ciencia cierta cuántas de ellas siguen en prisión y cuántas han salido de la cárcel.

El código penal de la República Islámica obliga a la mujer a cubrirse el pelo con un hijab, que debe dejar a la vista únicamente la cara y las manos, si no quiere hacer frente a dos meses de cárcel y multa. Tras la revolución de 1979, los clérigos impusieron la obligatoriedad del pañuelo primero a las funcionarias y, en 1983, a todas las iranís y también a las extranjeras que visitan el país.

Mañana, Dastis tendrá una reunión con empresarios que hacen negocios en el país y se trasladará a Isfahan, una ciudad turística y que las autoridades extranjeras deben visitar casi obligatoriamente para no disgustar a Teherán.