Un hombre hirió a puñaladas ayer a cuatro turistas extranjeros -tres mexicanos y una suiza- y cuatro jordanos -entre ellos un guía turístico y un agente de los servicios de seguridad- en el complejo de las ruinas romanas de la ciudad de Gerasa, según informó el ministro de Sanidad jordano, Saad Fayez. El atacante fue detenido.

Un vídeo difundido en las redes sociales recogió el espanto de los momentos vividos en uno de los lugares turísticos más visitado de Jordania. La imágenes mostraban a una mujer tendida en el suelo boca abajo con una herida en la espalda, mientras que otro hombre aparecía sentado con la camisa empapada de sangre. Entre un gran revuelo otra mujer pedía ayuda desesperada.

En un primer momento, fuentes de los servicios de seguridad jordanos indicaron que se trataba de turistas españoles, pero posteriormente se desmintió esta información. Según manifestó a este diario un guía turístico jordano que suele encargarse de grupos de habla hispana, los turistas apuñalados tenían «acento latino, no español».

Los ocho atacados en Gerasa, un punto muy visitado en Jordania, situado casi 50 kilómetros al norte de Amán, la capital jordana, fueron trasladados a un hospital, según confirmó en un comunicado la Dirección de Seguridad Pública de Jordania. El ministro de Sanidad indicó que las víctimas sufrieron «heridas leves, moderadas y serias».

Joven y con barba

El guía turístico Zuheir Zreiqat explicó a la agencia France Presse que el ataque produjo poco antes de mediodía, «cuando un centenar de turistas extranjeros se encontraban en el yacimiento arqueológico». «Un hombre de unos veinte años, con barba, vestido de negro y que llevaba un cuchillo, empezó a apuñalar a turistas», que gritaban y pedían auxilio, señaló Zreiqat.

«Hemos intervenido cuatro guías turísticos y tres turistas extranjeros para detener al atacante hasta que hemos podido reducirlo y dejarlo en el suelo. Le hemos quitado el cuchillo y no ha dicho una sola palabra hasta que han llegado los policías», añadió el guía.

En las redes sociales se difundió que al atacante era un joven que vive en el campo de refugiados palestinos de Souf, cerca de Gerasa, pero esta información no se pudo verificar. La policía aún no ha informado sobre el móvil del agresor.

Jordania ha sufrido varios ataques en los últimos años en lugares turísticos que perjudican mucho la economía del país, muy diezmada. El turismo es una buena fuente de ingresos para los jordanos, representa entre el 10% y el 12% del producto interior bruto (PIB) del país, que alberga vestigios arqueológicos de suma importancia como la ciudad nabatea de Petra, el templo romano de Gerasa, el desierto de Wadi Rum y el mar Muerto.

En el 2016 se produjo un ataque en la ciudadela de Karak en el que hombres armados mataron a diez personas: siete policías y dos civiles jordanos y una turista canadiense. El Estado Islámico reivindicó el atentado. Diez personas fueron condenadas por este ataque, dos de ellas a muerte. Jordania, que desempeñó un papel importante en la coalición liderada por EEUU contra el EI en Siria e Irak, acoge a 1,3 millones de refugiados sirios.