El grupo terrorista Estado Islámico ha reinvindicado la autoría del atentado en el que murieron 39 personas y otras 69 resultaron heridas en la discoteca Reina de Estambul en Año Nuevo.

En un comunicado difundido a través de internet, el EI afirmó que el autor de la matanza, que sigue huido, es un "heroico soldado del califato" autoproclamado por la organización yihadista.

En el texto, cuya veracidad no ha podido ser comprobada, se detalla que el terrorista usó granadas y una ametralladora y causó unas 150 víctimas entre muertos y heridos en el club Reina.

El EI afirma que esta acción es en "venganza" por los bombardeos contra musulmanes que efectúa Turquía en territorio sirio, por lo que acusó al gobierno de Ankara de ser "servidor de la Cruz".

"Que el Gobierno apóstata de Turquía sepa que la sangre de los musulmanes que se está derramando por los bombardeos de sus aviones va a convertirse en fuego en su propia casa", se indica en el texto del grupo yihadista.

El ataque tuvo lugar hacia la 01.30 hora local de (22.30 GMT) en la exclusiva discoteca situada en la orilla europea del río Bósforo, donde varios cientos de personas festejaban la llegada del Año Nuevo.

Según el diario turco HaberTürk, el terrorista descargó 180 balas antes de abandonar su arma en el local y darse a la fuga.

Turquía apoya a las facciones rebeldes en Siria y desde agosto pasado participa con carros de combate y aviones de guerra en una operación para combatir al EI en el norte del país vecino.