En su campaña por aniquiliar todo vestigio arqueológico ajeno al islam, el Estado Islámico ha destruido la Puerta de Mishqi, conocida también como Puerta de Dios, que data de hace 2.000 años, y que era una de las grandes puertas que custodiaban la antigua Nínive, la ciudad asiria que aparece en la Biblia y que fue fundada en el siglo VII antes de Cristo.

Una fuente del Instituto Británico para el Estudio de Irak ha confirmado los hechos al diario británico 'The Indepedent'. También ha explicado que, aunque no está confirmado, al parecer los yihadista han desmantelado la puerta con la intención de verderla a pedazos.

FUENTE DE INGRESOS

La venta de piezas arqueológicas es una de las principales fuentes de ingresos del Estado Islámico, además del petróleo que extrae de las zonas de Irak que controla.

Vecinos de la ciudad de Mosul, próxima al lugar donde se levantaba la Puerta de Mishqi, han dicho a la agencia de noticias kurda ARA que los yihadistas han utilizado equipo militar para destruir el monumento.