La Alianza por la Democracia Directa en Europa (ADDE), la formación paneuropea a la que pertenece el Partido por la Independencia de Reino Unido (UKIP), deberá devolver casi 173.000 euros del presupuesto europeo que, según los máximos responsables de la Eurocámara, malgastó durante 2015. El grupo tampoco recibirá los restantes 248.345 euros que tenía pendientes de cobro. El castigo lo ha adoptado este lunes la mesa del Parlamento Europeo, que reune al presidente y a los vicepresidentes, tras examinar una auditoría interna.
Los auditores examinaron un total de 500.615 euros asignados a ADDE durante 2015 y de los cuales 422.000, según la decisión, se quedarán en las arcas comunitarias tras detectarse irregularidades en los justificantes remitidos. El examen, filtrado la semana pasada, reveló que la formación que lidera Nigel Farage utilizó el dinero para financiar la campaña nacional y el referéndum sobre el brexit, algo expresamente prohibido por la normativa comunitaria sobre subvenciones.
“Estas reglas prohíben financiar a los partidos políticos nacionales, las campañas electorales nacionales y a candidatos o campañas de referéndum”, ha señalado el Parlamento Europeo en un comunicado. Concretamente, el UKIP utilizó el dinero europeo para financiar nueve encuestas en Reino Unido, antes de las elecciones generales y del referéndum celebrado a finales de julio, así como un informe.
MÁS RECLAMOS
El UKIP no es, sin embargo, el único partido acusado de utilizar de forma irregular fondos de la cámara. La mesa también ha decidido reclamar la devolución de 59.301 euros gastados por el partido popular belga, un partido de derechas francófono, así como otras partidas menores. Entre ellos 14.500 euros que la formación holandesa VNL se gastó en un anunció en un diario holandés contra el referéndum sobre el acuerdo de asociación UE-Ucrania.
El Parlamento Europeo concede anualmente ayudas a los partidos políticos y fundaciones que pueden utilizarse para cubrir hasta el 85% de los costes vinculados a operaciones y actividades de los partidos y fundaciones, como personal, gastos administrativos, reuniones, conferencias, estudios así como personas y campañas relacionadas con las elecciones europeas. A principios de año reciben el 80% de la partida asignada.
