El primer ministro británico, Boris Johnson anunció ayer la publicación la próxima semana de «un plan exhaustivo» con los pasos a dar para salir del confinamiento. El plan se centrará en reactivar la economía, reabrir las escuelas y organizar la vuelta progresiva al trabajo. El Gobierno británico debe decidir la renovación o relajación del actual aislamiento, que concluye el 7 de mayo, pero, aunque Johnson repitió que se «ha superado el pico» de la epidemia, todo indica que habrá pocos cambios sustanciales. El confinamiento puede prolongarse al menos hasta junio.

«Es vital no perder el control», señaló el primer ministro, ante el peligro de una recaída con una segunda expansión del virus. Una vez más recordó que para poder aliviar el confinamiento se deben superar cinco condiciones: estar seguros de que la sanidad pública no pueda verse colapsada, una bajada sostenida en el número de muertes, un descenso en el de infectados, contar con el material suficiente para la protección de los sanitarios y trabajadores en primera línea y asegurarse de que no habrá un segundo pico del coronavirus que desborde la sanidad pública.

La realidad es que, tras 38 días de confinamiento, las cifras de fallecidos siguen siendo elevadas. En las últimas 24 horas se produjeron 674 muertes, sumando un total de 26.711 en hospitales, residencias y domicilios particulares desde que comenzó la epidemia. Johnson rechazó que se hubiera ordenado demasiado tarde el confinamiento y defendió que las medidas se han tomado a su debido tiempo.

El primer ministro dirigió en Downing Street la conferencia de prensa diaria, por primera vez en cinco semanas, tras el retorno a sus funciones, superado ya el covid-19. Desde Escocia, la ministra principal, Nicola Sturgeon, también recomendó cautela. Sturgeon considera «demasiado pronto» levantar la próxima semana el confinamiento «de manera significativa». Los test son cruciales a la hora de reducir las restricciones, pero el Gobierno británico ha fracasado en el objetivo que se había marcado de realizar 100.000 pruebas diarias en Inglaterra para el 30 de abril. La última cifra ha sido de 81.611 test.

Además, ayer se conoció que el Reino Unido ha recibido como donativo del jeque de Dubái, Mohamed bin Rashid Al Maktoum, 60 millones de toneladas de equipos de protección para los sanitarios. El jeque ha sido imputado en los tribunales británicos como presunto secuestrador de dos de sus hijas, que están retenidas actualmente en Dubái.