El presidente iraní, Hasán Rohaní, ha descartado este miércoles hacer ningún cambio ni renegociar el pacto nuclear acordado en el 2015, por el que Irán, a cambio del levantamiento de sanciones, se comprometió a limitar sus actividades nucleares. «[Trump], has dicho que estás tomando decisiones con un líder europeo sobre un pacto en el que estaban involucrados siete países. ¿Quién te ha dado permiso? No tienes derecho», ha dicho Rohaní en un discurso televisado.

Este martes, el presidente de EEUU, Donald Trump, y su homólogo francés, Emmanuel Macron, se reunieron en Washington y, en buena sintonía, acordaron renegociar el pacto con Irán, al que Trump, desde su campaña electoral, se ha opuesto ferozmente. «Queremos trabajar por un nuevo acuerdo con Irán. Me gustaría que nos comprometiésemos a hacerlo durante las próximas semanas y meses», dijo Macron.

Lo que quieren Macron y Trump es ampliar las cláusulas del pacto: que también incluya la «actividad balística» iraní y sus incursiones en Siria, Irak, Yemen y el Líbano. En esos territorios, Teherán controla y financia varias milicias y grupos armados.

Pero Irán se niega. «Respetad lo que habéis firmado, lo que vuestros antecesores han acordado. Entonces, podremos empezar a hablar», ha dicho Rohaní, que ha atizado con dureza a Trump: «No tiene ningún conocimiento de política, de leyes ni de tratados internacionales. Es solo un empresario. Si alguien traiciona el acuerdo, debería saber que se enfrentará a severas consecuencias. Irán está preparado para cualquier posible escenario».

El presidente estadounidense dijo este martes que el pacto, aún en vigor, era «algo demente». Antes del 12 de mayo, Trump debe decidir si impone de nuevo sanciones económicas contra Teherán. Si lo hace, incumpliendo su parte del trato, el pacto acordado hace dos años —en el que participaron también Alemania, Rusia, China, el Reino Unido y la Unión Europea— habrá muerto.

Desacuerdos

Pero a parte de EEUU y ahora Francia, nadie quiere que el pacto se termine. Irán ha cumplido siempre con su parte: no ha desarrollado armamento nuclear ni tiene previsto hacerlo. «Veremos qué acaba pasando, pero ahora hay un acuerdo que aún existe. Funciona. Necesita ser preservado. Está evitando que Irán desarrolle un arma nuclear», ha dicho este miércoles la alta representante de Asuntos Exteriores de la UE, Federica Mogherini.

El acuerdo limita que Irán pueda, durante 10 años, enriquecer uranio a un máximo del 3%: suficiente para proporcionar energía con fines civiles pero no para construir una bomba. Para este fin, el uranio debe ser enriquecido como mínimo en un 90%.

«Nosotros queremos mantener la situación tal y como está. No hay otra alternativa», ha contestado el portavoz del gobierno ruso, Dimitri Péskov. China ha mostrado una opinión idéntica.

Pero Irán, pese que los demás países quieran mantener el pacto, asegura que también se retirará si lo hace EEUU. «La consecuencia inmediata, con toda probabilidad, será que Irán se retirará recíprocamente», ha declarado el ministro de Asuntos Exteriores iraní, Mohamed Yavad Zarif.

«Ante todas estas amenazas vacías de Trump, tomaremos medidas en lo que a nuestro programa de energía nuclear se refiere. Nuestras actividades serán distintas a las del pasado. Pero serán pacíficas -ha dicho Rohaní este miércoles- «No estamos pensando en desarrollar armas nucleares ni vamos a hacerlo».