Italia, el país europeo más castigado por el coronavirus y el primero en el continente en aplicar una estricta cuarena, empieza a salir del pozo. Las cifras de muertos y contagios así lo certifican y el primer ministro de Italia, Guiseppe Conte, ha informado de que tiene la "previsión razonable" de aplicar a partir del 4 de mayo un plan para rebajar las restricciones impuestas en el país.

"Antes del fin de semana confío en comunicarles este paso e explicarles los detalles de este programa articulado. Una previsión razonable es que lo apliquemos a partir del próximo 4 de mayo", ha avanzado el 'premier' italiano, en un mensaje publicado en su cuenta Facebook para explicar los planes de su Gobierno de rebajar las restricciones por el coronavirus. Ha dejado claro que la rebaja de las restricciones debe hacerse con responsabilidad y siguiendo las recomendaciones de los expertos.

Por primera vez el lunes desde que comenzó la emergencia el 21 de febrero, Italia redujo este lunes el número de enfermos positivos por coronavirus actuales y registra 181.228 contagios totales, 2.256 más en 24 horas pero la cifra más baja desde el 10 de marzo, lo que confirma que el país está controlando la pandemia. El número de enfermos positivos actuales es de 108.237 y el número de fallecidos asciende a 24.114. Las personas curadas son ya 48.877,, apuntó el jefe de Protección Civil, Angelo Borrelli.

Situación en Bérgamo

La situación en ciudad italiana de Bérgamo (Lombardía, norte), la más afectada por el coronavirus, es la prueba más clara que el país está controlando la pandemia. Por primera vez en mes y medio, la sala de urgencias de su hospital Papa Giovanni XXIII vacía. "Hemos salido de la fase aguda, lo intentamos y lo logramos. Finalmente hemos conseguido que haya más altas que fallecidos", ha explicado el jefe de la unidad de cuidados intensivos del hospital, Luca Lorini, en declaraciones al diario italiano 'La Repubblica'.

Pero pese a estos datos alentadores, el primer ministro italiano ha dicho que sería "irresponsable" retirar todas las restricciones y ha hecho hincapié en que hay que una decisión así podría hacer que la curva de contagios. Conte ha recalcado que los italianos tienen que estar "preparados" para contener una tendencia"en los niveles mínimos", de tal modo que el riesgo de nuevas infecciones resulte "tolerable" teniendo en cuenta las capacidades hospitalarias del país.

El primer ministro italiano ha señalado que el "programa" para la rebaja de las restricciones "tiene que tener una impronta nacional" también "peculiaridades territoriales" por las diferencias entre regiones en cuestiones como medios de transporte o camas en hospitales. "Es por ello que tenemos un grupo de expertos que están trabajando con nosotros noche y día", ha indicado.

Lombardía y Las Marcas, las últimas

El Observatorio Nacional de Salud de las Regiones Italianas ha elaborado un estudio en el que vaticina cuándo las regiones italianas contabilizarán cero contagios y sostiene que las primeras serán Basilicata y Umbría a finales de abril, mientras que las últimas serán Lombardía y Las Marcas, a finales de junio. Toscana y Emilia-Romaña no lo lograrán antes de finales de mayo y por ejemplo el Lacio, donde se encuentra Roma, tendrá que esperar hasta después del 12 de mayo.

Los alcaldes de Roma y Milán ya han propuesto que se regule el acceso al transporte público una vez las ciudades vuelvan a permitir la movilidad de las personas para que estos medios de transporte no se conviertan en focos de contagio. La alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, ha sugerido que se favorezca el transporte en bicicleta, también la eléctrica, para que la gente no opte por el vehículo privado en lugar del autobús y el metro y la ciudad quede invadida por el transporte privado.

El alcalde de Milán, Giuseppe Sala, también ha planteado la necesidad de que los accesos a los transportes públicos dispongan de un sistema que cuente el número de personas para no sobrepasar un aforo determinado que permita garantizar el metro y medio de distancia entre personas.