La jefa del Gobierno de Hong Kong, Carrie Lam, ha pedido disculpas a sus ciudadanos pero no ha retirado el polémico proyecto de ley de extradición que ha provocado multitudinarias protestas en los últimos días.

"Ofrezco mis más sinceras disculpas a la gente de Hong Kong. Asumo mi gran parte de responsabilidad en el conflicto que se ha creado", ha indicado la líder. Lam ya había pedido perdón el domingo a través de un comunicado tras una marcha en la que participó más de un millón de personas en protesta por la suspensión temporal del proyecto y exigiendo su retirada y la renuncia de Lam. "La gente ha expresado de manera pacífica lo que quiere, y lo he escuchado alto y claro", ha añadido la dirigente.