El juicio contra el primer ministro israelí en funciones, Binyamin Netanyahu, por tres casos de corrupción se ha aplazado dos meses a causa de las medidas de emergencia decretadas por el Ministerio de Justicia israelí por la pandemia de coronavirus.

El proceso por fraude, cohecho y abuso de poder, que tenía que empezar el 17 de marzo, se ha aplazado hasta el 24 de mayo, según ha indicado este domingo el Tribunal de Distrito de Jerusalén.

El ministro de Justicia israelí, Amir Ohana, ha anunciado hoy una serie de medidas que se decretarían para combatir la expansión del COVID-19 y que afectan a todo el sistema judicial de Israel, donde ya hay 200 casos de contagiados por coronavirus y miles bajo cuarentena.

Según el anuncio, la actividad judicial se congelará, excepto para audiencias urgentes. Las instrucciones se han dado al día siguiente de que Netanyahu y representantes del Ejecutivo de Israel presentaran una nueva lista de medidas de emergencia para frenar la propagación del COVID-19 en una conferencia de prensa.

Formato de emergencia

Un portavoz del Ministerio de Justicia ha señalado que la medida se ha tomado "como parte del esfuerzo nacional para prevenir la propagación del coronavirus, de acuerdo con las recomendaciones del personal del Ministerio de Sanidad y en coordinación con la administración de los tribunales y el Fiscal General".

Los tribunales trabajarán ciñéndose a un formato de emergencia y solo discutirán los casos de extensión o liberación de fianzas y la detención administrativa -sin cargos ni juicio- que se suele aplicar a los palestinos en casos que Israel considera "de seguridad".

El aplazamiento del inicio del juicio de Netanyahu se produce solo unos días después de que el Tribunal de Distrito de Jerusalén rechazara una solicitud del equipo de defensa del primer ministro para retrasar su juicio 45 días con el argumento de que no habían recibido toda la documentación de la investigación de los tres casos.

Desde este domingo están prohibidas en Israel de reuniones de más de diez personas y el cierre de todas las actividades de ocio. En un discurso el sábado, Netanyahu emplazó a sus conciudadanos a "adoptar un nuevo modo de vida" para las próximas semanas y posiblemente meses.

Así desde este domingo se cerrarán cafeterías, restaurantes, hoteles, centros comerciales, cines, gimnasios, salones de fiestas y centros asimilables, de lo que se desprende que todos los comercios no esenciales deberán cerrar. "Es una batalla por la salud pública. Estamos en guerra con un enemigo invisible (...). Podemos derrotarlo", señaló Netanyahu.